El presidente francés, François Hollande, precisó hoy que Francia aportó armas a la oposición moderada siria «hace varios meses», cuando estaban asediados por el dictador Bachar al Asad, de un lado, y el grupo yihadista Estado Islámico del otro.
El presidente ya había adelantado la víspera, en una entrevista publicada por el vespertino «Le Monde», que se habían entregado armas a los rebeldes sirios «dentro de los compromisos de los europeos», sin dar más detalles sobre el asunto.
Durante un viaje oficial a la isla de La Reunión, territorio francés en el océano Índico, Hollande precisó que la entrega se hizo «hace varios meses».
«Se hizo cuando los rebeldes sirios afrontaban a un tiempo a las tropas del dictador Bachar al Asad y al comportamiento del grupo terrorista Estado Islámico», comentó el presidente a un grupo de periodistas.
Hollande señaló que «no se podía dejar sola» a una oposición «que preparaba la democracia».
«Lo que sucede en Siria sigue siendo terrible (…) No debemos relajar el apoyo que dimos a esos rebeldes que son los únicos que tienen un espíritu democrático» en ese país, aseguró.
El Ministerio de Exteriores, por su parte, señaló que esas armas fueron entregadas según la decisión adoptada por el Consejo de Asuntos Exteriores de la Unión Europea del 27 de mayo de 2013 y «teniendo en cuenta las reglas de buena conducta» previstas en la «posición común» de diciembre de 2008.
En la entrevista con «Le Monde», Hollande aseguraba ayer que si se hubiera ayudado más a la oposición siria ahora la comunidad internacional no se vería obligada a «la terrible elección entre un dictador y un grupo terrorista».
El presidente francés consideró que el Estado Islámico es peor que Al Qaeda, porque está «estructurado, dispone de financiación importante y armas muy sofisticadas y amenaza a países como Irak, Siria o Líbano».
Para afrontarlo, el presidente propuso «una estrategia global» que supere el debate entre «intervención o no intervención», por lo que «próximamente» propondrá a sus socios «una conferencia sobre la seguridad en Irak y la lucha contra el Estado Islámico».
Hollande aseguró que la situación internacional es «la más grave desde 2001» y pidió a sus socios europeos y a Estados Unidos que intervengan contra el Estado Islámico, en particular en Irak.
En este sentido, el presidente afirmó hoy en La Reunión, que el primer convoy francés con ayuda a los kurdos de Irak ha llegado ya a Bagdad y mostró su satisfacción por el hecho de que otros socios europeos, como Alemania, hayan decidido seguir los pasos de Francia.
Hollande consideró «paradójico» que los grupos terroristas estén mejor armados que los países que les combaten y lo explicó por el hecho de que es a ellos a quienes han robado el armamento.
El presidente, que reiteró que la entrega de armas a los kurdos se hace «en concertación con las autoridades de Bagdad», descartó que ese equipamiento «pueda servir a otras causas» que no sean combatir al Estado Islámico.
París, 21 ago (EFE).-