La Premier League anunció a los medios de comunicación y a hinchas que vetará la entrada de aficionados que realicen actividades ilegales en los estadios, tales como usar elementos pirotécnicos e invadir el terreno de juego.
La medida pretende terminar con las invasiones de campo de los últimos meses, que ocasionaron agresiones a los técnicos, y con el uso de elementos pirotécnicos, como bengalas y bombas de humo.
Cuando la Premier registre un comportamiento de este estilo por parte de cualquier aficionado, se le impondrá la prohibición automática de asistir a cualquier partido durante un periodo mínimo de un año.
Esta política entra en vigor de forma automática y será válida tanto para los partidos de casa como para los de fuera.