El jefe canadiense de General Motors acoge con satisfacción la posibilidad de imponer aranceles a las importaciones de vehículos eléctricos chinos, ya que el importante productor BYD busca ingresar al mercado.
«Nos alienta que el gobierno esté estudiando estas cuestiones», dijo Kristian Aquilina, presidente de GM Canadá.
“Porque sobre la base de una fuerte competencia, de un campo de juego justo, nos anima a realizar grandes inversiones y a emplear a mucha gente”.
La semana pasada, el gobierno federal concluyó una consulta de 30 días sobre si seguir el ejemplo de Estados Unidos y la Unión Europea de imponer aranceles elevados para contrarrestar el volumen de producción que sale de China.
El sector automovilístico de Canadá enfrenta una “competencia desleal” por parte de la política estatal china de sobrecapacidad y una amplia gama de políticas y prácticas no comerciales, dijo el gobierno federal al anunciar las consultas.
Sin mencionar directamente a los productores chinos, Aquilina señaló preocupaciones similares.
“Unas condiciones de juego desiguales pueden ser muy perjudiciales, y es justo que el gobierno examine estas cuestiones y considere todos los hechos”, afirmó.
El presidente de la Asociación Canadiense de Fabricantes de Vehículos (CVA, por sus siglas en inglés) pidió comentarios más específicos sobre los aranceles. El grupo ha presionado fuertemente para que se alineen con la política estadounidense, de modo que las inversiones en la industria canadiense de vehículos eléctricos por más de 40 mil millones de dólares anunciadas en los últimos cuatro años tengan margen para prosperar.
“Esta transición está ocurriendo, pero lleva tiempo, y tenemos que asegurarnos de que exista el apoyo adecuado para permitir que estas inversiones y estas nuevas instalaciones entren en funcionamiento”, dijo el presidente Brian Kingston.
Alinearse con Estados Unidos también enviaría las señales correctas antes de las conversaciones comerciales de América del Norte programadas para 2026, dijo Kingston.
“Ahora es el momento. Pongamos en marcha estas políticas y demostremos al pueblo estadounidense que vamos a apoyarlo en esta estrategia hacia China”.
Grupos como Unifor, Global Automakers of Canada y la Cámara de Comercio Canadiense también han expresado su apoyo, mientras que asociaciones centradas en el clima como Clean Energy Canada han rechazado la medida por temor a que elimine opciones más asequibles para vehículos eléctricos.
Los aranceles potenciales podrían ser sustanciales. En mayo, Estados Unidos aumentó sus aranceles del 25% al 100%, mientras que la UE ha fijado aranceles que podrían llegar al 38%.
Por ahora, los únicos vehículos eléctricos fabricados en China que se importan a Canadá son los del gigante tecnológico estadounidense Tesla, fabricados en la fábrica de la compañía en Shanghái, que están sujetos a un arancel de importación del seis por ciento.
Sin embargo, existe potencial para que BYD, con sede en China y el mayor productor de vehículos eléctricos del mundo por volumen, llegue a Canadá.
Un registro de un cabildero del 24 de julio mostró que la compañía había contratado a un consultor para asesorar sobre “asuntos relacionados con la esperada entrada de BYD al mercado de Canadá” y la aplicación de aranceles a los vehículos eléctricos.
BYD, que eliminó gradualmente los modelos que funcionan solo con gasolina en 2022, vendió más de tres millones de vehículos el año pasado. La compañía presentó su Seagull EV el año pasado a un precio inicial equivalente a unos 14.600 dólares para una versión con autonomía de 305 kilómetros.
Mientras tanto, General Motors descontinuó su modelo básico Chevy Bolt EV el año pasado, sólo para aclarar que planeaba relanzar el modelo más adelante.
El momento del regreso del Bolt y su posible precio aún no se han fijado, pero la compañía pretende traerlo de vuelta a finales del año próximo, dijo Aquilina.
Por ahora, la compañía está centrada en lanzar su recién llegado Chevy Equinox EV, que se vende al por menor por alrededor de $ 50,000, lo que dice coloca a GM con el EV más asequible en Canadá que tiene alrededor de 500 kilómetros de autonomía.
Si bien el rango de precios aún está fuera del alcance de muchos, también refleja el aumento de los precios de los automóviles en general.
Según AutoTrader, el precio medio de un vehículo nuevo en Canadá fue de unos 68.000 dólares en junio, frente a los 55.000 dólares de hace dos años. Mientras tanto, el Canadian Black Book afirma que el precio medio de un vehículo eléctrico superó los 73.000 dólares el año pasado.
El aumento de los precios de los vehículos eléctricos se produjo porque los productores fabricaron vehículos más grandes con baterías más grandes que brindaban mayor autonomía (y ganancias potenciales), pero GM dice que ve el apetito de los clientes de renunciar a parte de esa autonomía.
“Al principio, cuando la ansiedad por la autonomía estaba en su punto más alto, eso se convirtió en lo que los clientes querían más que cualquier otra cosa”, dijo Aquilina.
“Lo que ha demostrado el Bolt… es que los clientes están dispuestos a hacer ese equilibrio entre autonomía y precio porque, por supuesto, existe una relación y eso realmente nos ha animado a reintroducir el Bolt”.
El debate sobre precios y tarifas surge en un momento en que las ventas de vehículos eléctricos están retrocediendo y los productores controlan sus expectativas y ambiciones sobre la transición.
A fines de julio, Umicore anunció que había detenido el gasto en una planta de materiales para baterías de 2.760 millones de dólares en el este de Ontario, citando proyecciones de crecimiento sustancialmente reducidas para el mercado de vehículos eléctricos.
Y en abril, Ford retrasó por dos años la producción planificada de vehículos eléctricos en su planta de Oakville, Ontario, solo para anunciar en junio que estaba cambiando los planes de producción de vehículos eléctricos a sus camionetas Super Duty.
Mientras tanto, los vehículos de cero emisiones, que incluyen baterías puras e híbridos enchufables, representaron el 11,3 por ciento de todas las matriculaciones de automóviles en el primer trimestre, frente al 12 por ciento del trimestre anterior, dijo Statistics Canada, mientras que el crecimiento de Estados Unidos se está desacelerando aún más.
A pesar de un ligero retroceso, las matriculaciones de vehículos eléctricos a batería aumentaron un 57 por ciento en los primeros cuatro meses de 2024 en comparación con el año pasado, mientras que los híbridos enchufables aumentaron más del 75 por ciento, según S&P Global Mobility.
Lo que muestran las ganancias y los retrocesos es que la transición no será una línea recta, dijo Aquilina.
“Lo que GM ha aprendido es la necesidad de ser flexible y adaptable, porque el cambio es algo que tendrá sus altibajos”.
