La eurozona se quedará al margen de la recuperación económica global en 2013 y cerrará el año con una contracción del 0,2 %, mientras que la economía mundial crecerá un 3,5 % impulsada por los emergentes y el buen comportamiento de EE.UU., según el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El FMI divulgó hoy su informe actualizado de «Perspectivas de la Economía Mundial» en el que apenas modifica sus previsiones de octubre pasado, excepto en la zona euro.
En 2013, la economía global crecerá un 3,5 % (una décima menos que lo proyectado anteriormente) y en 2014 lo hará un 4,1 % (también una décima menos que lo estimado).
«Las medidas adoptadas han reducido los graves riesgos de crisis en la zona del euro y en Estados Unidos. Pero en la zona del euro la vuelta a una etapa de recuperación tras una contracción prolongada se retrasará más», aseguró el fondo.
El principal cambio respecto a las proyecciones de octubre se produce precisamente en la eurozona, donde los economistas del FMI han reducido en tres décimas las perspectivas de crecimiento.
Si en sus últimas previsiones estimaban el fin de la recesión y crecimiento positivo de 0,1 % para este año, ahora las proyecciones señalan que los números negativos continuarán en 2013 y la contracción alcanzará el 0,2 %.
Por ello, el organismo internacional advierte que «los riesgos de un estancamiento prolongado en toda la zona del euro aumentarán si no se mantiene el ímpetu de las reformas».
«Los esfuerzos de ajuste en los países de la periferia deben ser sostenidos y contar con el respaldo de los países del núcleo, entre otras formas utilizando plenamente los cortafuegos europeos aprovechando la flexibilidad que ofrece el Pacto Fiscal y avanzando hacia una unión bancaria plena y una mayor integración fiscal», según el documento.
El motor económico, Alemania, comienza a ver el impacto de este contexto negativo ya que se reducen en tres décimas sus previsiones respecto a octubre para 2013: de 0,9 % a 0,6% del producto interior bruto (PIB).
«La actividad en la periferia de la zona del euro fue incluso más débil de lo previsto, con ciertos síntomas de un contagio más fuerte de esa debilidad al núcleo de la zona del euro», explicó el FMI.
Italia y España seguirán en recesión en 2013 con una caída del PIB de 1 % y 1,5 %, respectivamente, tres y una décima peor que lo estimado anteriormente, aunque se espera que regresen a tasas positivas en 2014.
Por su parte, las economías emergentes mantendrán el tirón con China e India a la cabeza, quienes verán aumentar progresivamente sus tasas de crecimiento en los próximos dos años.
Se espera que China se expanda en 2013 un 8,2 % y un 8,5 % en 2014; mientras que India lo haga un 5,9 % este año y 6,4 % el siguiente.
También contribuye Estados Unidos a este repunte «gradual» mundial, gracias especialmente a su buen comportamiento durante el segundo trimestre de 2012.
En 2013 se espera que crezca un 2 % y en 2014 un 3 %, aunque el FMI subraya la necesidad de que «se evite una consolidación fiscal excesiva a corto plazo, elevar sin demora el tope de la deuda y acordar un plan creíble de consolidación fiscal a mediano plazo».
Latinoamérica, por contra, ve ralentizarse algo su impulso, en gran parte debido al frenazo de su mayor economía, Brasil, que el Fondo espera crezca un 3,5 % este año, cuatro décimas menos que lo que preveía en octubre.
El organismo restó tres décimas a sus previsiones de crecimiento de la economía latinoamericana en 2013, hasta el 3,6 %, y una décima en 2014 hasta el 3,9 %.
La pasada semana la directora del FMI, Christine Lagarde, afirmó que «el colapso económico se había detenido», pero urgió a los gobernantes a evitar la «recaída».
Washington, 23 ene (EFE).-