El organismo rector del fútbol mundial, la FIFA, y su homólogo europeo, la UEFA, escribieron a la Federación Española de Fútbol (RFEF) solicitando una actualización detallada después de que se realizaron arrestos en una investigación de corrupción la semana pasada en España.
El secretario general de la FIFA, Mattias Grafstrom, y el secretario general de la UEFA, Theodore Theodoridis, enviaron una carta conjunta a Pedro Rocha, presidente del comité directivo de la RFEF, expresando su preocupación y solicitando más información.
En la carta, tanto la FIFA como la UEFA preguntaron a la RFEF sobre la naturaleza de las acusaciones y sobre quién está siendo investigado.
La RFEF despidió a dos ejecutivos la semana pasada porque, según dijo, estaban vinculados a una investigación de corrupción multimillonaria.
La policía registró la sede de la RFEF y un apartamento de su expresidente Luis Rubiales, mientras siete personas fueron arrestadas en una investigación de corrupción por un acuerdo multimillonario para trasladar la Supercopa de España a Arabia Saudita.
Rubiales ha negado repetidamente haber actuado mal.
La FIFA y la UEFA también solicitaron información sobre los próximos pasos de la investigación y las acciones que se esperan.
España es uno de los coanfitriones del Mundial de 2030, junto con Portugal y Marruecos, pero la RFEF se ha visto obligada a lidiar recientemente con una serie de problemas fuera del campo.
En septiembre, Rubiales dimitió como presidente de la RFEF y un mes después la FIFA le prohibió participar en todas las actividades futbolísticas durante tres años por supuestamente besar en los labios a la jugadora Jenni Hermoso sin consentimiento tras el triunfo de España en el Mundial femenino.
Rubiales argumentó que fue consensuado y negó haber actuado mal, pero un fiscal del Tribunal Superior de España busca una sentencia de prisión de dos años y medio para el hombre de 46 años.
La FIFA desestimó en enero la apelación de Rubiales contra la sanción de tres años.
A Rocha también se le preguntó cuándo convocará el comité directivo a una Asamblea General Extraordinaria para elegir un nuevo presidente para lo que resta del mandato presidencial.