El gobierno federal anunció el viernes que Canadá y Estados Unidos acordaron mantener la frontera cerrada por un mes más, a pesar de la presión de familias con integrantes en ambas partes de la frontera.
El ministro de Inmigración, Marco Mendicino, afirmó que «conoce muchas personas que están en situaciones desgarradoras y simpatiza con ellas»; y agregó que «está reflexionando sobre si es necesario hacer más exenciones a medida que el gobierno busca cumplir sus objetivos con la reunificación familiar y la protección de la salud pública».
“Las medidas que hemos implementado en la frontera están ayudando a reducir la propagación del virus y eso está salvando vidas”, anunció.
Solicitudes sin respuestas
Las solicitudes urgentes al Departamento de Inmigración de algún tipo de exención a las reglas existentes quedaron sin respuesta; teniendo a muchos caso familiares a la espera de una flexibilización a las normas fronterizas tras encontrarse en situaciones difíciles.
Cuando la frontera se cerró inicialmente en marzo, hubo excepciones muy limitadas a quién se le permitió ingresar, más allá de los ciudadanos canadienses y los residentes permanentes.
Esas restricciones se suavizaron en junio para permitir la entrada de algunos familiares, una medida que Mendicino señaló en la entrevista como prueba del compromiso del gobierno con la reunificación familiar.
Personas fuera de las restricciones
Otros atrapados en el limbo incluyen a personas cuyas relaciones de derecho consuetudinario no cumplen con la definición de las que se establecen en la ley de inmigración.
Muchas personas afectadas se han unido en un grupo de defensa que celebró una conferencia de prensa en Parliament Hill el miércoles pasado para exigir un cambio.
También han presentado una petición en la Cámara de los Comunes con más de 5.300 firmas.
“Pedimos que se desarrolle un cronograma y un plan para reunir a nuestras familias de manera segura, dijo David Poon, un médico de Regina cuya pareja está atrapada en Irlanda.
«A la NHL se le permitió un plan de cuarentena para mantenerse a sí mismos y a sus familias seguros, ¿dónde está el de las familias canadienses?»