Una colaboración entre una empresa china y un equipo de investigación de Halifax, con el objetivo de realizar los primeros ensayos clínicos de Canadá de una posible vacuna COVID-19, se abandonó en medio de crecientes tensiones entre los dos países.
La asociación entre el Consejo Nacional de Investigación de Canadá y CanSino Biologics fue anunciada por el gobierno federal en mayo.
Se suponía que un equipo del Centro Canadiense de Vacunación de la Universidad de Dalhousie trabajaría con CanSino para realizar los primeros ensayos clínicos. La vacuna de CanSino, llamada Ad5-nCoV, ya se estaba sometiendo a ensayos en humanos en China y ha mostrado resultados prometedores.
Historia de dificultades
En mayo, Health Canada dio luz verde para que comenzaran los ensayos canadienses, y la esperanza era que pudieran comenzar en unas semanas.
Pero a fines de julio, The Canadian Press informó que la asociación entre Canadá y China estaba en dificultades, diciendo que China había retrasado los envíos que se suponía que la compañía enviaría a los investigadores de Halifax a fines de mayo.
En una declaración enviada por correo electrónico, el Consejo Nacional de Investigación (NRC) dijo que la aduana china no había aprobado el envío de la vacuna candidata a Canadá.
El comunicado dijo que los colaboradores de CanSino en el gobierno chino, el Instituto de Tecnología de Beijing y el Ministerio de Ciencia y Tecnología, que habían proporcionado fondos a CanSino, revisaron el acuerdo entre la NRC y CanSino antes de su firma.
Cambios en procesos de envíos de vacunas
«Después de la firma, el gobierno de China introdujo cambios en el proceso con respecto al envío de vacunas a otros países», dijo la NRC en su comunicado.
«El proceso no está claro para la NRC, pero CanSino no tiene la autoridad para enviar la vacuna en este momento».
El presidente y director ejecutivo de la empresa, el Dr. Xuefeng Yu, dijo a The Globe and Mail, que informó que la indecisión burocrática era la razón detrás de los retrasos en los envíos, y que ahora el momento de hacer las pruebas «ya había pasado».
Yu agregó a su declaración que algunas divisiones del gobierno chino no tenían claro si la vacuna debería «ir a pruebas globales o cómo manejarla».
Estudiar ‘más allá de su fecha de caducidad’
Scott Halperin, director del Centro Canadiense de Vacunación, dijo que era decepcionante no poder trabajar con CanSino.
«Estábamos listos para comenzar el estudio, teníamos todas las aprobaciones en junio, pero la compañía había estado tratando de enviarnos la vacuna pero no se le había permitido hacerlo», dijo.
«No importa lo que intentaron, no pudieron obtener las aprobaciones para enviar la vacuna».
«En este punto, CanSino ya está listo para entrar en estudios de Fase 3», dijo. «Así que este estudio, que iba a proporcionar más información, creo que ya pasó su fecha de caducidad».
Afirmó que la vacuna de CanSino es una de las vacunas más avanzadas del mundo en términos de su proceso de aprobación, por lo que podría haber sido una de las primeras vacunas disponibles para los canadienses si todos los estudios siguieran teniendo un buen aspecto.
Halperin aseguró que siempre hay riesgos al colaborar con otros países, por lo que Canadá ha estado presionando para asegurarse de que haya vacunas fabricadas en Canadá disponibles.
«Hay otras vacunas en trámite, y habrá muchos otros estudios que se están realizando con otras vacunas que, con suerte, también se verán bien».
