Las pruebas muestran partículas diminutas, pero no se conoce ningún efecto sobre la salud humana
Están en el aire, el suelo y el hielo ártico. Incluso hay un parche enorme lleno de grasa tres veces el tamaño de Francia esparcida por el Océano Pacífico.
Los microplásticos se han encontrado en casi todos los entornos del planeta y, según una investigación del mercado, también se encuentran en las principales marcas de agua embotellada de Canadá.
Investigadores de la Universidad McGill probaron una muestra de las marcas Aquafina, Dasani, Eska, Naya y Nestle Pure Life, companias que según Euromonitor International facturaron en ventas en Canadá por más de mil millones de dólares el año pasado.
Las compañías comercializan sus productos con etiquetas y promociones que sugieren pureza, pero se encontraron microplásticos en cada marca, incluso en botellas de vidrio de agua Eska, aunque a niveles más bajos que su contraparte de plástico.
«El hecho de que tengamos plástico en una botella de agua que es de vidrio sugiere que el plástico no proviene solo de … la botella misma o la tapa [de la botella]», dijo Nathalie Tufenkji, quien dirigió la investigación en Biocolloids de McGill y Laboratorio de Superficies.
«Podría provenir del entorno en el que está teniendo lugar el proceso de embotellado».
El equipo de Tufenkji probó agua embotellada comprada en Vancouver, Calgary, Toronto y Montreal. Treinta de las 50 botellas analizadas tenían microplásticos.
Microplásticos: diminutos fragmentos de plástico de menos de cinco milímetros (5000 micras) de longitud pueden provenir de diversas fuentes: desgaste diario de los neumáticos, lavado de prendas con fibras plásticas o rotura de botellas y bolsas de plástico.
En total, se encontraron 12 tipos de plásticos, incluidos los tipos en tapas de botellas y botellas de agua – polietileno y tereftalato de polietileno (PET) – en el agua probada. Otros tipos encontrados incluyen acetato de polivinilo, nylon, rayón, poliestireno y politetrafluoroetileno.
La mayoría de las partículas de más de 100 micras, aproximadamente el ancho de un cabello, se identificaron como plástico. Algunas de las partículas más pequeñas que eso también se identificaron como plástico, usando un método diferente.
El equipo de McGill descubrió que, en promedio, había 5.08 partículas por cada 500 mililitros de agua para partículas de más de 100 micras, mientras que el promedio de partículas de menos de 100 micras subió a 725.12 por cada 500 mililitros.
El conteo de partículas varió de una botella a otra. Uno tenía 96 partículas, mientras que otro tenía 2.268.
Cuando se les informó de los resultados de las pruebas, las cinco marcas le dijeron a Marketplace que se toman en serio la seguridad alimentaria, el control de calidad y la filtración, mientras que mantener el agua embotellada es seguro. Nestlé dijo que había encontrado microplásticos en su agua embotellada en niveles de trazas.
No se conocen los efectos, si es que existen, de los microplásticos en humanos, pero se han realizado estudios de laboratorio que analizan su impacto en los animales.
Chelsea Rochman, ecologista de la Universidad de Toronto y experto en contaminación por microplásticos, ha visto los efectos que pueden tener los microplásticos cuando se los alimenta a animales como el pescado. Incluyen toxicidad hepática, etapas iniciales de formación de tumores y alteración del sistema endocrino.
«¿Deberíamos preocuparnos? Sí, deberíamos preocuparnos de que exista un material que estamos usando tan predominantemente en nuestra sociedad que se ha vuelto tan omnipresente», dijo. «¿Deberíamos preocuparnos por la salud [humana]? Todavía tenemos que trabajar en eso».
Aunque se cree que la mayoría de los microplásticos serán excretados por el cuerpo humano, existe preocupación, según un informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, que partículas de menos de 150 micrones puedan atravesar la pared intestinal y terminar en el torrente sanguíneo y los órganos.
¿Qué dicen las compañías?
Nestle dijo a Marketplace que encontró microplástico en un nivel de traza en el agua, pero debido a que se detectó una cantidad tan pequeña «no fue posible determinar si estos rastros son intrínsecos a nuestras operaciones de agua embotellada o simplemente el resultado de la contaminación cruzada del entorno de laboratorio »
La compañía dijo que considera que «la presencia de microplásticos en nuestro medio ambiente es uno de los principales desafíos de sostenibilidad a los que se enfrenta la sociedad hoy en día». También notó la posibilidad de que Nile Red pudiera crear falsos positivos en los resultados de la prueba.
Aquafina, propiedad de Pepsi, dijo que la ciencia sobre microplásticos y microfibras «es un campo emergente (…) que requiere más análisis científicos, investigaciones revisadas por pares y una mayor colaboración entre muchas partes interesadas».
Coca-Cola, que fabrica Dasani, dijo que «la calidad de nuestros productos y la seguridad de nuestros consumidores son de primordial importancia para nosotros y los tomamos muy en serio».
La compañía afirmo a través de un comunicado, que tiene «algunos de los estándares de calidad más estrictos en la industria, y el agua que usamos en nuestras bebidas está sujeta a procesos de filtración de varios pasos antes de la producción».
Naya, con sede en Quebec, dijo que sus «estrictas medidas de control de calidad y métodos de producción sanitaria, como la microfiltración, el enjuague de botellas antes del llenado y otros procedimientos de seguridad alimentaria, dan como resultado un producto seguro y confiable».
La Asociación Canadiense de Agua Embotellada y la Asociación Canadiense de Bebidas en nombre de Eska dijeron en un comunicado: «El estudio de Marketplace sobre agua embotellada … utilizó un método de prueba con varias limitaciones que Marketplace [de CBC] ha reconocido … Los consumidores pueden confiar en que los productos de agua embotellada están seguros.»
