En la cuarta fecha de las Eliminatorias sudamericanas en Quito no se presenciaron goles, pero si un 0-0 que quedó pequeño para un encuentro en el que hubo ritmo, chances de gol y poca efectividad en los arcos.
En el partido evidenciamos un encuentro de fuerzas equitativo, con un primer tramo donde los ecuatorianos gozaron de dos llegadas a los palos y un segundo tiempo en el que los colombianos desperdiciaron un penal y el VAR le quitó un tanto por fuera de juego.
El resultado del partido fue que Colombia continuara sin perder, dándole 6 unidades al registrar un triunfo y tres empates; por otro lado Ecuador llegó a las 4 luego de encontrarse en -3 tras ser sancionados.
El partido inició con todas las revoluciones, a toda marcha sin respirar buscando lograr anotar. Ahí fue donde los locales tomaron la ventaja al lograr los dos tinos.
Primero, el mediocampista del Chelsea Moisés Caicedo casi sorprende en un tiro libre esquinado al arquero Álvaro Montero, que reemplazó al suspendido Camilo Vargas, y luego fue el delantero Kevin Rodríguez, una de las novedades del once titular de Ecuador, el que estrelló el balón en el palo con un disparo colocado desde fuera del área.
Luego los cafeteros tomaro la iniciativas y movieron las masas con un misil de Jhon Arias, que el arquero ecuatoriano envió al córner. Pero el momento más tenebroso para ello fue el gol anulado a Luis Díaz por estar fuera de juego.
‘Lucho’ amargó a la defensa ecuatoriana con sus escaladas por la banda izquierda junto a su dupla James Rodríguez, que si hubiese visto su desmarque un instante antes, Colombia se habría ido al entretiempo por delante en el marcador.
Tras la reanudación del encuentro, Díaz seguía imparable, quien le filtró un espléndido pase a Arias al corazón del área, donde le cometieron penal. El colombiano tomó el mando pero el tanto fue capturado por Ramírez.
Acto seguido, el ecuatoriano Carlos Cuesta anotoó un balón muerto en el área, pero el árbitro Facundo Tello lo invalidó por fuera de juego posicional al encontrar un futbolista colombiano en la trayectoria de la pelota, un detalle validado por el VAR.
En los minutos finales, ambos equipos se conformaron con repartirse un punto después del constante intercambio de golpes sin lograr perforar ninguno de los arcos.