Dos tormentas invernales que afectan a unas 100 millones de personas en su avance desde Texas, en el sur de EE.UU., hacia la región de Nueva Inglaterra, que engloba varios estados del noreste, han dejado al menos 26 muertos y amplios cortes del suministro eléctrico.
La ola de frío ártico que cubre gran parte de los 48 estados del país ha saturado las redes de energía eléctrica en Texas, Luisiana y Kentucky desde el domingo, cuando las temperaturas cayeron a los niveles más bajos en décadas.
Tan extremas son las condiciones climáticas, que el martes cubrían con nieve el 73 % del territorio estadounidense, que han causado demoras y suspensiones en la campaña para la vacunación contra la covid-19.
Según el canal CNN, los puestos de vacunación en al menos 15 estados han resultado afectados por el temporal.
CIERRE DE SITIOS DE VACUNACIÓN CONTRA LA COVID
De acuerdo a la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, en inglés), hay estados que han informado del cierre de los sitios de inmunización debido a las tormentas y se están reprogramando todas las citas que tenían para después de que el temporal pase.
En las ciudades texanas de Dallas y Austin, con temperatura de -6 grados Celsius, la nieve y las lluvias heladas todavía ocasionaban problemas de tránsito este miércoles, mientras seguían en vigor advertencias de inclemencias de clima desde el norte de Texas hasta Virginia Occidental.
Poco antes del mediodía unos 3,4 millones de residentes en Texas seguían sin suministro eléctrico, 159.000 en Oregón y otros 100.000 en Kentucky.
En numerosas partes del país, donde ha habido apagones para evitar que la demanda de electricidad supere la capacidad de la red, las autoridades han recomendado a la población que hierva el agua antes de consumirla debido a la posibilidad de que no haya capacidad suficiente para procesarla y convertirla en potable.
Las aerolíneas comerciales han cancelado al menos 4.037 vuelos y han informado de retrasos en la partida de otros 2.281.
Al tiempo que la primera de las dos tormentas invernales seguía su rumbo hacia el noreste del país, una segunda se precipitaba este miércoles sobre Texas; Ambos sistemas han dejado una acumulación de nieve de más de 15 centímetros desde Arkansas hasta la región central de los Apalaches.
Para hoy, el Servicio Meteorológico Nacional (NWS, en inglés) ha pronosticado acumulaciones de hielo en algunas partes de Texas, Luisiana, Arkansas, Misisipi, Carolina del Norte y Virginia.
«En las áreas con estas devastadoras acumulaciones de hielo los residentes pueden esperar que las condiciones de viaje sean peligrosas, que haya numerosos apagones y extensos daños en los árboles», indicó el NWS.
En Jackson (Misisipi), la municipalidad ha cerrado oficinas y en la mayor parte del estado se han suspendido las actividades educativas, desde las guarderías infantiles a las universidades.
LA DISYUNTIVA DE PROGRAMAR UN APAGÓN
La empresa Entergy, que suministra electricidad en Arkansas, avisó este miércoles de que, mientras se avecina otra nevada, espera evitar otra serie de apagones programados como los aplicados el martes.
Por su parte, Rob Roedel, portavoz de Electric Cooperatives of Arkansas, dijo que la empresa es «cautelosamente optimista» de que no se verá forzada a recurrir a los apagones: «el martes nos topamos con una situación en la que no había alternativa».
Los meteorólogos han advertido de vendavales extremadamente fríos y de una acumulación de nieve de hasta 12 centímetros en el área metropolitana de Memphis, en Tennessee, antes de que la tormenta se aleje el jueves por la mañana.
Entretanto, en Kansas City, en Misuri, la compañía Evergy notificó a sus usuarios de apagones programados que durarían unos 30 minutos, pero la televisión local KCTV5, de la cadena FOX, indicó que los cortes en el suministro de energía duraron más de dos horas.
«Evergy explicó que las temperaturas extremadamente bajas demoraron la labor de las cuadrillas que trababan para restablecer el suministro», añadió el informe. «La compañía recomienda que los clientes se preparen, cargando las baterías de su teléfonos, y usando ropas de abrigos, mantas y linternas».