El Salvador registró entre enero y abril de este año 695 homicidios, una cifra inferior en 530 a los 1.225 contabilizados durante el mismo período del año pasado, aunque en mayo se produjo un repunte, informó hoy una fuente oficial.
«En el acumulado anual (hasta abril de este año) se contabilizan 530 asesinatos menos», en relación a los 1.225 registrados en el mismo lapso de 2012, detalló este jueves el Ministerio de Justicia y Seguridad en un comunicado.
«Las cifras policiales reflejan que el mes de abril se convirtió en el menos violento desde el inicio del proceso de pacificación que vive el país», que comenzó en marzo de 2012 con la «tregua» entre las principales pandillas, la Mara Salvatrucha y la Pandilla 18, destacó el boletín.
Según el documento, en abril de este año 144 personas fueron asesinadas en diferentes hechos de violencia, un 7,7 % menos respecto a las 156 muertas en el mismo mes de 2012.
La «tregua» de las pandillas para no asesinarse entre sí, ha permitido una disminución de los homicidios en alrededor de un 50 %, según las autoridades de seguridad.
Las cifras de homicidios, sin embargo, registran un leve aumento en «los primeros días de mayo», sin que reflejen «una tendencia marcada», agregó el comunicado que no aportó datos concretos.
Pese a la «tregua», el ministro de Justicia y Seguridad, David Munguía Payés, reconoció hoy en declaraciones a la prensa que «el 56 % de los homicidios» los siguen cometiendo las pandillas.
En ocasiones anteriores el ministro ha asegurado que los pandilleros son los causantes del 90 % de los asesinatos.
El «alza» de los primeros días de mayo se debe a la «intolerancia social, en donde tenemos varios homicidios relacionados con el alcohol, otros homofóbicos, cosas que no teníamos anteriormente», aseguró.
En los primeros ocho días de mayo hubo al menos 65 asesinatos, según datos de la policía publicados por el Diario El Mundo.
El boletín también señaló que entre enero y abril la Policía efectuó 14.879 detenciones, 2.342 de ellas de pandilleros.
El presidente salvadoreño, Mauricio Funes, dijo el lunes pasado que el Gobierno ha incrementado la persecución de los criminales, y no como aseguran sectores antagónicos a la «tregua», que afirman que los han dejado de perseguir porque han negociado con ellos.
El obispo castrense Fabio Colindres y el exdiputado del gobernante Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) Raúl Mijango fueron los mediadores del armisticio, en el que el Gobierno solo actuó como facilitador, según las autoridades, que niegan haber negociado con los pandilleros.
San Salvador, 9 may (EFE).-
