Las esperanzas de Carlo Ancelotti para seguir al mando del Real Madrid, y del madridismo en un abril decisivo en el que se resuelve la eliminatoria copera ante el Barcelona y el futuro en la Liga de Campeones, pasan por el regreso de la mejor versión de Karim Benzema. Vinícius Junior necesita un socio para la conquista de títulos grandes y el ‘Balón de Oro’ recuperó el olfato goleador.
Retirado de su selección, la francesa, por el pulso personal con el seleccionador Didier Deschamps tras el último incidente en el Mundial 2022, las dos semanas de parón le sentaron bien a Karim. Ya sin molestias ni lesiones que han marcado su temporada, listo para aportar en un momento clave y aumentar su pegada para aspirar a acercarse a los números del pasado curso, el mejor de su carrera.
Llegaba al duelo ante el Real Valladolid con la obligación de afinar puntería para el clásico de Copa del Rey del miércoles del Camp Nou. Benzema solo había marcado dos goles en las seis últimas jornadas de Liga que había disputado y fue con un doblete en el mismo encuentro, ante el colista Elche. Su equipo lo necesita fino si quiere remontar la eliminatoria y acceder a la final copera.
El Real Madrid añoró sus goles en tres partidos en los que prácticamente se despidió del título, los empates ante Atlético de Madrid y Betis más la derrota en el clásico del Camp Nou. Choques que debían resucitar el pulso por el título y lo enterraron.
En el trabajado triunfo de la primera vuelta en Valladolid, en el regreso de la competición liguera tras la disputa de un Mundial en Catar del que se había convertido en una de las grandes ausencias, Benzema dejó su huella en los minutos finales para decidirlo con un doblete. Desde aquel encuentro solamente marcó en dos de nueve jornadas.
La necesidad del Valladolid y los riesgos que tomó Pacheta en el Santiago Bernabéu, permitieron a Benzema firmar su mejor partido goleador de la temporada. Su primer triplete, en apenas seis minutos, para meterse de lleno en la pelea por ser máximo goleador de LaLiga con el barcelonista Robert Lewandowski, que suma 17 tantos, por 14 de Karim.
La confianza en la definición regresó para Benzema. Con olfato de ‘matador’ para buscar la espalda de su marcador en el primer y rematar de cabeza a placer el pase al segundo palo de Vinícius Junior, afinando puntería en el segundo con un disparo ajustado al poste tras un amago y rescatando una media chilena para cerrar su triplete tras la asistencia de Rodrygo. Lo hizo entre el minuto 29 y el 36.
Alcanza Karim 22 goles entre todas las competiciones esta campaña. A estas alturas, hace un año, firmaba 26. Y se fue pronto del partido, a los 59 minutos, por el deseo de Ancelotti de cuidar su físico para el clásico de semifinales de Copa del Rey y ya en el horizonte la eliminatoria europea ante el Chelsea, con la remontada de la pasada edición en la retina y la exhibición de pegada de Benzema en Stamford Bridge con un triplete.
Fueron los momentos en los que lideró cada triunfo y su figura se impuso a PSG, Chelsea o Manchester City para impulsar al Real Madrid a la final de la Liga de Campeones de las remontadas.
En el presente recupera la confianza de golpe en su reto de regresar a su identidad letal que, de momento, no ha mostrado esta temporada. Firmó su cuarto triplete en LaLiga, tras haberlo logrado antes ante Rayo Vallecano, Athletic Club y hace dos años al Celta. Y con 233 tantos en la competición española, se queda ya a uno solo de Hugo Sánchez y de convertirse en el cuarto máximo artillero de la historia de la competición española. Fue despedido por toda la afición del Bernabéu en pie y con una ovación repleta de ilusión ante lo que viene.