Jerusalén, 22 mar (EFE).- El presidente israelí, Reuven Rivlin, inicia hoy contactos con los partidos con representación parlamentaria tras las legislativas del martes, una serie de consultas previas a su decisión de encargar la formación del nuevo gobierno.
Se espera que más de los 61 diputados requeridos, de los 120 del Parlamento israelí (Kneset), recomienden al jefe del Estado que designe al primer ministro y líder del conservador Likud, Benjamín Netanyahu, la tarea de formar coalición.
Su formación política fue la que mayor número de diputados obtuvo, 30, con lo que Netanyahu se presenta como el dirigente lógico al que el presidente encomendará la formación del nuevo gobierno.
Rivlin manifestó durante la campaña y a la luz de que las encuestas en intención de voto apuntaban que el apoyo del electorado se repartiría entre el denominado Campo Sionista, liderado por el laborista Isaac Herzog y el Likud de Netanyahu, que favorecería el establecimiento de un gobierno de unidad, posibilidad que los resultados electorales han desmontado.
Durante las jornada de hoy, primera de dos días de consultas, Rivlin tiene previsto entrevistarse con representantes del Likud, del Campo Sionista, de la Lista Común -que aglutina a los partidos árabes-, del Hogar Judío de Naftalí Bennet, y los dos partidos ultra-ortodoxos que lograron representación parlamentaria.
El lunes proseguirá los contactos con los centristas Yesh Atid y Kulanu, este último encabezado por un ex-likudista y que según todos los pronósticos integrará la nueva coalición, así como el ultraderechista Israel Nuestro Hogar y el izquierdista Meretz.
A Netanyahu se le presenta ahora la tarea de ir aquilatando apoyos, y obtener garantías de sus aliados de la derecha nacionalista y los ultra-ortodoxos para sumarse a una coalición de gobierno que si, como parece probable, prospera, será una de las más amplias y homogéneas de la historia moderna de Israel, al estar compuesta por 67 diputados de muy similar tendencia.
Los analistas consideran que el líder del Likud tendrá que conciliar las ambiciones de sus eventuales socios y las apetencias de sus colaboradores dentro de su partido, pues todos aspiran a puestos de relevancia y a todos deberá satisfacer de una manera u otra a fin de mantener en el tiempo una coalición estable.
El miércoles, el presidente del Tribunal Supremo y de la Comisión Electoral, Salim Yubran, presentará al presidente Rivlin los resultados oficiales de las elecciones y sólo entonces y en caso de ser designado para ello, Netanyahu podrá iniciar las conversaciones oficiales para la formación del nuevo Ejecutivo israelí.
Al proclamarse vencedor de los comicios del martes Netanyahu manifestó su intención de formar gobierno en el plazo de dos o tres semanas, aunque todo el proceso podría durar hasta 45 días.