Bogotá, 18 ago (EFE).- El ministro colombiano de Hacienda, Mauricio Cárdenas, dijo hoy que el país debe acomodarse al «nuevo escenario» dictado por el precio del petróleo, que ha disparado la cotización del dólar por encima de los 3.000 pesos.
«Lo que cabe es acomodarnos a ese nuevo escenario que está dictado por el precio del petróleo. Es una fuerza muy grande, es algo que más que navegar contra la corriente, tenemos que adaptarnos y acomodarnos a esa nueva realidad», declaró Cárdenas a periodistas, al descartar una posible intervención del emisor en el mercado.
El dólar superó hoy la barrera de los 3.000 pesos colombianos, lo que supone un nuevo máximo histórico para la venta, en medio de noticias sobre la fortaleza de la economía de Estados Unidos y las dudas generadas por China y Brasil.
La divisa estadounidense cerró este lunes en 3.003,96 pesos, con un alza de 19,95 pesos, en una jornada en la que alcanzó un máximo de 3.015,00 pesos.
El ministro señaló que «el precio del dólar en Colombia está atado al precio del petróleo», e indicó que en la medida en que la cotización internacional del barril de crudo ha bajado se ha registrado un alza de la moneda estadounidense.
«El petróleo es nuestro principal producto de exportación, es la principal fuente generadora de divisas, por eso es natural que si cae el precio del petróleo pues suba el precio del dólar», indicó el titular de Hacienda, y apuntó que Colombia «en materia de precios del petróleo es un espectador».
Cárdenas aseguró que el país «está en una transición» hacia una economía «menos dependiente del petróleo» y en la que se le dé protagonismo a sectores como la industria, el turismo y la agricultura, entre otros.
«Para esos nuevos protagonismos es fundamental este nivel del dólar, porque nos va a ayudar a que se estimulen las exportaciones y sobre todo a reemplazar importaciones con producción nacional», añadió.
Sobre los efectos del precio del dólar en el costo de vida, el funcionario puntualizó que la inflación en el país «ha estado controlada» y recomendó que en la medida en que sea posible se reemplace la producción importada por nacional.
Además afirmó que para el caso de los bienes de capital que no se producen en el país, «el Gobierno tomó la decisión de eliminar los aranceles».
Cárdenas previó asimismo que la devaluación del peso supondrá para el próximo año un incremento en intereses por concepto de deuda externa de 3 billones de pesos (unos 998 millones de dólares), un 10 % más en el costo del servicio de la deuda.
