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La misoginia extrema será tratada como una forma de extremismo bajo los nuevos planes del gobierno, dijo el Ministerio del Interior.
Yvette Cooper, la ministra del Interior, ha ordenado una revisión de la estrategia antiextremismo del Reino Unido para determinar la mejor manera de abordar las amenazas que plantean las ideologías dañinas.
El análisis examinará el odio a las mujeres como una de las tendencias ideológicas que, según el gobierno, está ganando terreno.
La Sra. Cooper dijo que ha habido un aumento del extremismo «tanto en línea como en nuestras calles» que «desgasta el tejido mismo de nuestras comunidades y nuestra democracia».
El estudio analizará el ascenso del extremismo islamista y de extrema derecha en el Reino Unido, así como tendencias ideológicas más amplias, incluida la misoginia extrema o creencias que encajan en categorías más amplias, como la violencia.
También se examinarán las causas y la conducta de la radicalización de los jóvenes.
La Sra. Cooper dijo que la estrategia «mapeará y monitoreará las tendencias extremistas» para determinar cómo perturbarlas y desviar a la gente de ellas.
También «identificará cualquier laguna en las políticas existentes que deba abordarse para acabar con quienes promueven creencias dañinas y odiosas y la violencia», dijo.
La Sra. Cooper dijo que la acción contra el extremismo ha sido «muy debilitada» en los últimos años.
El trabajo servirá de base para una nueva estrategia contra el extremismo, prometida en el manifiesto laborista y que, según el Ministerio del Interior, «responderá a los patrones crecientes y cambiantes» del extremismo en todo el Reino Unido.
No está claro cuánto tiempo durará esta «revisión rápida». Es una de las numerosas revisiones de políticas que el Partido Laborista ha anunciado desde que llegó al poder en julio, entre las que se incluyen la Revisión Estratégica de Defensa, la revisión del gasto y una revisión del Currículo Nacional.
Los críticos podrían argumentar que algunas revisiones son un indicador de acciones reales, pero el Partido Laborista ha señalado que no ha habido una nueva Estrategia Contra el Extremismo desde 2015, y que ya es necesaria una evaluación de las amenazas nuevas y emergentes.
Tampoco es la primera vez que el gobierno considera la misoginia como una forma de extremismo.
Desde hace algunos años existe preocupación en torno a la “cultura Incel” , un movimiento online integrado principalmente por hombres jóvenes que se describen a sí mismos como “involuntariamente célibes” y culpan a las mujeres y a los “machos alfa” de sus problemas.
Un tiroteo masivo en Plymouth en 2021 por parte de Jake Davison, de 22 años, quien mató a cinco personas antes de suicidarse, estuvo vinculado a la ideología Incel.
En ese momento no se tomaron más medidas políticas, pero incidentes como ese, y también el ascenso de personas influyentes en las redes sociales como Andrew Tate (un autoproclamado misógino), pueden haber empujado al nuevo gobierno a pensarlo dos veces.
