BARCELONA — El Barcelona venció 4-0 al Borussia Dortmund el miércoles y colocando pie y medio en las semifinales de la Champions alcanzó los 145 goles anotados desde que comenzó la temporada, una cifra récord a estas alturas que igualó los anotados en los primeros 48 partidos de la temporada 2011-12, que se mantiene globalmente como la más alta de la historia del club.
Entonces aquel era el Barcelona de Lionel Messi, capaz de romper todos los registros goleadores y líder absoluto del equipo azulgrana, ya fuera con Guardiola, Vilanova, Martino, Luis Enrique, Valverde, Setién o Ronald Koeman.
Hoy es Robert Lewandowski quien toma el relevo anotador, liderando un tridente junto a Lamine Yamal y Raphinha que va camino de compararse al legendario que Messi formó con Luis Suárez y Neymar.
De momento Lewandowski suma 99 goles en 140 partidos con el Barça y está decidido a meterse en los libros de historia del club, unos libros que recuerdan con letras de oro aquel Barça de Messi y Guardiola.
Aquella campaña 2011-12, con Pep al mando, el Barça acabó marcando 190 goles, una cifra que se antoja extremadamente difícil de alcanzar por cuanto entonces se cerró el curso jugando 64 partidos y en el actual, en el mejor de los casos el equipo de Hansi Flick llegaría a los 61 si se clasificara para la final de la Champions League, que curiosamente no jugó en 2012.
Lo que ya ha logrado este renovado y frenético equipo es superar las mejores estadísticas que seguían a aquella temporada 2011-12. El Barça de Luis Enrique sumaba 139 goles en 2015 a estas alturas, un registro que era el segundo mejor de la historia y ha quedado atrás.
Al Barça le quedan por delante, si llega a la final de Munich, 13 partidos por jugar (ocho de Liga, cuatro de Champions y la final de Copa) y necesitaría marcar nada menos que 45 goles para igualar aquella descomunal marca, lo que significaría una media cercana a los 3.5 goles por encuentro.
De Messi a Lewandowski
Actualmente el equipo de Hansi Flick disfruta de una media de 3.02 goles por encuentro que en cuanto a la estadística es la mejor de la historia, superando los 2.97 de media con que cerró aquella temporada 2011-12. Y si algo hay que destacar entre todos estos números monumentales es que los ha logrado un Barça que por fin, parece, supera el luto por la marcha de Leo Messi, el goleador por antonomasia.
La temporada 2011-12 Leo Messi la cerró marcando 73 goles, su mayor marca en un curso, por encima de los 59 que anotó en el curso 2015-16 o los 58 de un año antes. Siempre fue Messi el jugador de referencia a la hora de contabilizar los goles de un Barça que transitó bajo su liderazgo y el de ese tridente que formó con Suárez y Neymar, el mejor del mundo y que al cabo de los años se personaliza en el formado por Lewandowski, Raphinha y Lamine Yamal.
La última temporada de Messi en el Barça, la 2020-21, se cerró marcando el equipo que entrenó Ronald Koeman 122 goles en 54 partidos. A partir de ahí, en los tres cursos siguientes el conjunto azulgrana se quedó con números inferiores. Anotó 86 goles en 53 partidos la temporada 2021-22, consiguió 101 dianas en otros 53 encuentros en la 2022-23 entera con Xavi y llegó a 110 en idéntico número de partidos.
Siempre por debajo del rendimiento ofensivo de un Barça con Leo Messi hasta el aterrizaje de Hansi Flick en el banquillo, auténtico líder de una revolución nunca vista en el club.
