El joven Marvin Henriques Correia, amigo y supuesto cómplice del brasileño que confesó el asesinato de cuatro miembros de su familia en España, continúa detenido, pese a que las autoridades decidieron no formular cargos contra él, según dijo hoy a Efe su abogado, Sheyrner Asfora.
«Hubo una confusión, porque la Policía Federal pidió que el caso sea archivado pues Marvin no ha sido imputado de ningún delito» y ha recomendado su liberación, pero eso todavía no ha ocurrido, explicó Asfora.
«Sigue detenido y estamos a la espera de que se resuelva sobre un hábeas corpus» que ha intentado la defensa, agregó.
Fuentes policiales del estado de Paraíba, donde está detenido Henriques Correa, dijeron este sábado a Efe que el joven había sido liberado sin cargos, pese a que intercambió mensajes telefónicos con el asesino confeso, Patrick Nogueira Oliveira, en momentos en que cometía el crimen en Pioz, a unos 60 kilómetros de Madrid.
Asfora atribuyó eso a una «confusión», pero sí confirmó que la Policía Federal ha concluido sus investigaciones sobre el asunto y decidió no formular cargos, por lo que entiende que la liberación debería ocurrir.
La excarcelación no llegó a concretarse debido a una apelación del Ministerio Público, que entiende que Henriques Correia actuó como «cómplice» en el asesinato y que además omitió informar sobre el asunto a las autoridades.
Según el abogado, la omisión no puede ser considerada, pues «un ciudadano no tiene el deber jurídico de informar» sobre un delito a las autoridades, y la supuesta complicidad «no cabe», ya que Marvin «no tuvo participación alguna» en los hechos.
«Su conducta puede ser reprobable desde el punto de vista moral, pero no jurídico» y eso es lo que ha concluido la Policía Federal, indicó.
Henriques Correia fue detenido la semana pasada, en el marco de las investigaciones que se realizan en Brasil sobre el caso, una vez que en su teléfono móvil fue descubierto un intercambio de mensajes con Nogueira Oliveira en el momento en que se encontraba en la casa de sus familiares en Pioz.
Algunos segmentos de los mensajes fueron difundidos por el canal de televisión Globo y dejaban claro que Henriques Correia supo del asunto en el mismo momento en que su amigo cometía el crimen en España.
La conversación difundida por Globo comienza a las 14.06 hora brasileña (19.06 hora española) del 17 de agosto, el día en que Nogueira asesinó y descuartizó en España a su tío Marcos Nogueira, su esposa, Janaína Américo, y los dos niños pequeños de la pareja, de uno y cuatro años de edad.
Según Globo, a lo largo de dos horas y media el asesino narra con detalles por momentos morbosos lo que estaba haciendo, al punto de que llega a contar que ya había matado a su tía y a los dos niños y que esperaba a su tío para asesinarlo.
También le envió unas fotografías que tomó en la escena del crimen junto a los cuerpos y relató que usó guantes para no dejar huellas digitales.
Su amigo, que estaba en Brasil, llegó a reír y a aconsejarle que una vez que concluyera saliera de la casa por la puerta principal y con la mayor normalidad.
Tras haber cometido el crimen, Nogueira Oliveira volvió a Brasil, pero una vez que la policía española descubrió su responsabilidad en los hechos decidió regresar a Madrid, donde se entregó y confesó su autoría.
Brasilia, 5 nov (EFE).-