Estados Unidos y los principales países y entidades donantes de Guatemala pidieron una pronta investigación de los hechos ocurridos el sábado, cuando un grupo de encapuchados incendió unas oficinas del Congreso y la policía reprimió la manifestación pacífica contra el Gobierno.
«Apelamos al Gobierno de Guatemala a investigar los hechos del 21 de noviembre y responsabilizar a los culpables de la generación de violencia y/o del uso de la fuerza excesiva», esgrimió el llamado Grupo de Donantes G-13 en un comunicado compartido a la prensa este lunes.
Instaron a la población guatemalteca «a unirse en búsqueda de soluciones concertadas, a abstenerse de lenguaje confrontativo y a aprovechar todas las oportunidades para lograr un diálogo inclusivo», indicaron en su mensaje.
Sobre la manifestación del sábado, el G-13 enfatizó que «la gran mayoría de los manifestantes ejercieron pacíficamente su derecho constitucional, pero la expresión de las propias ideas nunca debe convertirse en violencia».
Las instalaciones del Parlamento fueron quemadas entre un 15 y 20 por ciento -a la espera de confirmación por las autoridades- el sábado por cientos de manifestantes encapuchados que asaltaron un Congreso sin protección policial (pese a la anunciada manifestación) y le prendieron fuego con antorchas.
Tras diez minutos de caos en el que los manifestantes destruyeron parte de las instalaciones, las fuerzas de seguridad limpiaron la zona y los cuerpos de socorro apagaron el incendio.
En paralelo, al mismo tiempo a menos de un kilómetro de distancia, unos 10.000 guatemaltecos se manifestaron pacíficamente desde el mediodía hasta la noche contra Giammattei y el Parlamento frente al Palacio Nacional de la Cultura, sede del Gobierno.
La Policía Nacional Civil (PNC) desplegó unidades antidisturbios por las calles aledañas a la plaza y al Congreso y se enfrascó en enfrentamientos contra grupos que lanzaron piedras y palos, mientras la fuerza pública respondió con gases lacrimógenos y detenciones.
Hubo una veintena de heridos y dos personas fueron internadas en un hospital público por haber sufrido traumas en sus ojos, debido a disparos de los gases de la PNC. Además, los antidisturbios lanzó gases también a la plaza pública donde habían familias con niños y personas de la tercera edad.
Pese al ataque, la población continuó manifestando hasta el fin de la tarde, cuando comenzaron las detenciones de personas que, posteriormente, fueron liberadas por falta de indicios al haber sido individualizados los cargos en su contra.
Además de Estados Unidos, el G-13 lo integran la Unión Europea, la Organización de Estados Americanos (OEA), el Sistema de Naciones Unidas, Alemania, Canadá, España, Francia, Italia, Reino Unido, Suiza y Suecia.