Estados Unidos dijo hoy al Gobierno salvadoreño que «ya es tiempo» de escoger a su nuevo fiscal general, cuya elección fue anulada en julio pasado por la Corte Suprema de Justicia (CSJ).
«De forma bien enfática, ya es tiempo, ya es tiempo de seleccionar un fiscal general», exclamó hoy en declaraciones a periodistas la embajadora de Estados Unidos en El Salvador, Mari Carmen Aponte.
Esta es la segunda vez que la funcionaria se pronuncia al respecto, ya que en octubre pasado también instó al Parlamento salvadoreño a solucionar la problemática.
«Exhortó a las partes a que prontamente, bien prontamente, seleccionen un fiscal que se dedique al cumplimiento de la ley y hacer las persecuciones que haya que hacer para que todos podamos tener un El Salvador mucho más seguro», enfatizó.
Aponte señaló también que este país centroamericano necesita «adelantar la agenda del cumplimiento de la ley» y que «la mejor forma» de hacerlo «es con una cabeza al frente» de la oficina de la Fiscalía General de la República (FGR).
La Sala de lo Constitucional de la CSJ anuló el 10 de julio pasado la elección de Astor Escalante como nuevo fiscal general en lugar de Romeo Barahona, cuya gestión concluyó el 18 de septiembre.
El Supremo ordenó repetir el proceso nuevamente bajo el argumento que la elección no le correspondía a la legislatura pasada, sino a la actual, que empezó el 1 de mayo.
El arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar, insistió este domingo en que los diputados son «los que tienen la palabra» para elegir al nuevo fiscal y que es necesario que lo hagan «pronto».
Desde el 3 de septiembre pasado los diferentes partidos con representación en la Asamblea Legislativa iniciaron una negociación para elegir al fiscal, pero hasta la fecha continúan sin ningún acuerdo.
Por medio de la negociación la lista de los 47 candidatos, que también se presentaron a la elección del 24 de abril, la cual fue anulada, ha sido reducida a tres.
Los nominados son: Romeo Barahona, quien aspiraba a la reelección, Astor Escalante y el abogado Luis Antonio Martínez.
La FGR funciona con normalidad, ya que desde el 19 de septiembre pasado la titularidad la ostenta el fiscal general adjunto, Ovidio Portillo.
No obstante, temporalmente la institución es dirigida por el auditor de la FGR, Higinio Marroquín, debido a que Portillo está incapacitado por problemas de salud, anunció la semana pasada dicho organismo, sin dar más detalles.