Santo Domingo, 14 jun (EFE).- Estados Unidos aumentó hoy la presión sobre Venezuela al pedir por primera vez que el Gobierno de Nicolás Maduro permita la celebración de un referendo revocatorio «a tiempo» ante la Asamblea General anual de los 34 países de la Organización de Estados Americanos (OEA).
«Estados Unidos se une al secretario general (de la OEA, Luis) Almagro y a otros en la comunidad internacional haciendo un llamado al Gobierno de Venezuela para que libere a los presos políticos, respete la libertad de expresión y de reunión», afirmó el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, en su intervención en la primera sesión de la Asamblea.
«Para que alivie la escasez de alimentos y medicinas y honre los propios mecanismos de la Constitución incluyendo un referendo revocatorio puntual que forma parte del proceso constitucional», añadió.
El jefe de la diplomacia estadounidense se refirió así al referendo revocatorio que promueve la mayoría opositora en la Asamblea Nacional de Venezuela para que se convoque este año, mientras que el chavismo plantea que, de celebrarse, sea en 2017.
La fecha del referendo es clave, porque si se celebra este año y gana el sí a la revocatoria, se podrían convocar a elecciones presidenciales, mientras que si tiene lugar en 2017 se podría destituir a Maduro pero le sustituiría su vicepresidente.
Las peticiones que hizo Kerry a Caracas coinciden con las que Almagro exige para cualquier iniciativa de diálogo en Venezuela: referendo revocatorio este año, liberación de los «presos políticos», respeto a los derechos humanos y apertura de canales de ayuda internacional para paliar la «crisis humanitaria», según dijo recientemente en una entrevista con Efe.
«La invocación del artículo 20 de la Carta Democrática (para Venezuela) por parte de Almagro dará lugar a un muy necesario debate sobre Venezuela en la OEA, estamos listos y dispuestos a participar en ese debate y, junto a los socios de la OEA, a facilitar el diálogo» en Venezuela, dijo Kerry.
En mayo, Kerry dio su apoyo público a la iniciativa de diálogo en Venezuela que lidera la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y los expresidentes José Luis Rodríguez Zapatero (España), Leonel Fernández (República Dominicana) y Martín Torrijos (Panamá).
No obstante, EE.UU. ha defendido en repetidas ocasiones la Carta Democrática, aprobada por unanimidad en 2001, como instrumento de defensa de la democracia en la región y no descarta apoyar la iniciativa de Almagro.
La OEA debatirá el próximo 23 de junio en su sede de Washington si prosigue con el proceso gradual de la Carta, que podría llevar a gestiones diplomáticas (18 votos de embajadores), a la convocatoria urgente de una reunión de cancilleres (24 votos de embajadores) y, en último lugar, a la suspensión de Venezuela del ente (24 votos de cancilleres).
Los países de la Alianza Bolivariana (ALBA) anunciaron recientemente que aprovecharán la Asamblea para expresar su rechazo frontal a la aplicación de la Carta a Caracas.
Esa postura la dejó clara hoy la canciller venezolana, Delcy Rodríguez, que acusó a Almagro de estar sirviendo de agente a Washington, llamó a que se estudie su comportamiento «inadmisible» y afirmó que «ha implosionado la Secretaría General vulnerando permanentemente las normas que enmarcan sus funciones».
Almagro, que no intervino hoy en la sesión plenaria, respondió a la canciller a través de su cuenta de la red social Twitter.
«Ya dije lo que tenía que decir», dijo en un mensaje, y añadió en otro: «Ya contesté a mentiras. Espero que para la sesión del 23 de junio Venezuela presente argumentos y no ataques personales».
El canciller de Ecuador, Guillaume Long, pidió a Almagro que actúe «según su mandato» y consideró que «sus iniciativas unilaterales restan credibilidad a la OEA», un mensaje que compartió el viceministro de Relaciones Exteriores de Nicaragua, Denis Ronaldo Moncada.
Por su parte, la canciller mexicana, Claudia Ruiz Massieu, dijo que su país «reconoce que el Gobierno de Venezuela y todos los actores en Venezuela están comprometidos con el diálogo», un mensaje con el que coincidió su homóloga colombiana, María Angela Holguín, quien dijo estar convencida «de las bondades del diálogo» en marcha.
La vicepresidenta panameña, Isabel De Saint Malo de Alvarado, ofreció su apoyo para el diálogo en curso y consideró que este «tema debe resolverse entre los venezolanos»
Está previsto que Kerry mantenga hoy una reunión bilateral con Rodríguez en los márgenes de la Asamblea, que se celebra entre hoy y mañana en la capital dominicana.
Ese encuentro llega en un momento en el que la crisis de Venezuela es el asunto de mayor preocupación en el continente y el tema en el punto de mira en la cita anual de máximo nivel de la OEA, que reúne este año a 27 cancilleres, a diferencia de los 17 del encuentro de 2015 en Washington.
Cristina García Casado