Dos víctimas mortales, cientos de miles de personas sin suministro eléctrico y miles de desplazados son los vestigios del huracán Fiona tras su paso en República Dominicana. Con al menos una docena de comunidades incomunicadas se inicia a cuantificar los daños del ciclón.
Luis Abinader, el presidente dominicano, expresó este martes que la inspección total de los daños tardará unos 5 días, pero ya se van conociendo algunas cifras.
En estos momentos, 10.840 personas siguen desplazadas, 2.168 casas afectadas (613 de ellas destruidas) y unos 317.000 usuarios continúan sin suministro eléctrico, según el último boletín del Centro de Operaciones de Emergencias (COE).
Además, hay más de 70 acueductos dañados, de ellos 68 fuera de servicio; 23 carreteras están afectadas, así como tres pasos a nivel y dieciséis puentes de los que dos han colapsado.
A ello se suman dos fallecidos, un hombre de 72 años al que le cayó un árbol encima y una joven de 18, víctima del derrumbe de un poste del tendido eléctrico mientras circulaba en motocicleta.
Abinader anunció medidas para mitigar los efectos del ciclón y, así, las alcaldías de las zonas afectadas recibirán el jueves fondos especiales. Además, se han abierto dos centros de operaciones especiales para atender las necesidades de esas áreas, uno en Samaná (noreste) y otro en Higüey (este).
