El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, canceló el nombramiento de Yara Suhyén Pérez Calero como su embajadora en Colombia, que surtirá efecto a partir del próximo 31 de diciembre.
A través de un acuerdo presidencial, el mandatario decidió «dejar sin efecto el nombramiento» de Pérez Calero en el cargo de embajadora extraordinaria y plenipotenciaria de la República de Nicaragua ante el Gobierno de la República de Colombia, con sede en Bogotá.
«El presente acuerdo surte sus efectos a partir del 31 de diciembre del 2021», indicó el mandatario, que no explicó las razones que tuvo para dejar sin efecto el nombramiento de su embajadora en Bogotá, que ocupaba ese cargo desde febrero de 2016.
De momento Ortega no ha nombrado a un nuevo embajador nicaragüense en Bogotá.
El pasado 6 de septiembre, el líder sandinista abogó por la unidad de los nicaragüenses en el litigio que mantiene con Colombia ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) respecto a sus fronteras marítimas, y reprochó que Bogotá pretenda, según dijo, desconocer un fallo emitido por la CIJ en noviembre de 2012, cuando estableció límites marítimos entre ambos países.
«Allí están el Gobierno de Colombia hablando de que hay que regresar al punto de partida, donde ya la Corte Internacional de Justicia se pronunció y dijo esa delimitación, que por la fuerza imponía Colombia a Nicaragua, no es así», señaló Ortega en esa ocasión.
«La Corte dijo: a Nicaragua le pertenece todo ese territorio y ahora (los colombianos) están queriendo echarse para atrás», agregó.
Managua ha llevado a Colombia ante la CIJ por tercera vez en los últimos 20 años para esclarecer la frontera marítima entre ambos países y, en esta ocasión, ha reclamado al tribunal que le exija a Bogotá el respeto al fallo de 2012.
Esa decisión confirmó la soberanía colombiana de siete cayos cercanos a las islas de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, pero le dio a Nicaragua una porción de mar mayor de la que tenía anteriormente, lo que provocó el rechazo de Bogotá.
Esta disputa legal se desarrolla en paralelo a otra incoada por Nicaragua. En ese segundo caso, Managua le pidió a la CIJ que esclarezca los derechos y deberes de ambos países respecto a una plataforma continental más allá de las 200 millas náuticas desde la costa del mar Caribe.