Activistas estudiantiles pro palestinos en Montreal instalaron un campamento en los terrenos de la Universidad McGill este fin de semana, luego de una ola de protestas similares en campus de todo Estados Unidos.
El domingo por la tarde se habían instalado más de dos docenas de tiendas de campaña en el campus del centro de la escuela, con un flujo constante de visitantes que pasaban para dejar donaciones y suministros.
«Ruth», una estudiante de McGill y portavoz que no quiso dar su nombre completo por temor a represalias de la escuela o la policía, dijo que los campistas tienen la intención de quedarse indefinidamente.
Dijo que los estudiantes activistas de las universidades McGill y Concordia están exigiendo que sus escuelas desinviertan y corten los vínculos y la financiación de las instituciones y empresas israelíes en respuesta a la ofensiva de Israel en Gaza.
McGill dijo en un comunicado fechado el sábado por la noche que los estudiantes rechazaron una solicitud para retirar sus tiendas de campaña, pero confirmaron que la protesta había sido pacífica y se limitó al campo inferior.
El portavoz del campamento dijo que los estudiantes de Montreal se han inspirado en las docenas de protestas pro palestinas que han aparecido en los campus de todo Estados Unidos en el contexto de la guerra entre Israel y Hamas. Los críticos argumentan que las protestas son antisemitas y hacen que los estudiantes judíos se sientan inseguros.
«Es un movimiento increíble, y sentimos que es nuestro momento de contribuir a ese movimiento y tratar de reorientar toda nuestra energía en Gaza, en la situación que todavía está costando miles de vidas en este momento», dijo Ruth.
Associated Press informó que casi 900 personas habían sido arrestadas en protestas universitarias en Estados Unidos desde el 18 de abril, cuando la policía de Nueva York desmanteló un campamento de protesta pro palestino en la Universidad de Columbia y arrestó a más de 100 manifestantes.
Las tensiones están ligadas al actual conflicto en Gaza, que comenzó después de que Hamas lanzara un ataque mortal contra el sur de Israel el 7 de octubre, matando a unas 1.200 personas, en su mayoría civiles, y tomando aproximadamente 250 rehenes. Prometiendo acabar con Hamás, Israel lanzó una ofensiva en Gaza.
En la guerra que siguió, Israel mató a más de 34.000 palestinos en la Franja de Gaza, según el Ministerio de Salud local.
