Panamá, 2 sep (EFE).- Autoridades panameñas se reunieron con el embajador de Holanda en Panamá, Wibe J. de Boer, para coordinar la entrega de las pertenencias incluidas en el expediente del caso de la desaparición de las holandesas Lisanne Froon y Kris Kremers a los familiares de las jóvenes, informó hoy el Ministerio Público (Fiscalía).
Froon y Kremers, de 22 y 21 años, respectivamente, desaparecieron en abril pasado tras adentrarse en un camino selvático en la población de Boquete, en la provincia de Chiriquí, cerca de la frontera con Costa Rica.
Análisis de ADN realizados en junio y agosto pasados a restos humanos encontrados en zonas cercanas confirmaron que correspondían a Lisanne y a Kremers, respectivamente.
El Ministerio Público confirmó el martes en un comunicado que el embajador holandés visitó a la procuradora general de la Nación, Ana Isabel Belfon, acompañada por la fiscal superior de Chiriquí, Betzaida Pitti, encargada del caso de las holandesas, y el fiscal encargado de Asunto Internacional, Víctor Barrios.
Las autoridades panameñas se reunieron con el embajador holandés «con el propósito de conocer el estado actual del expediente por la desaparición de las holandesas Lisanne Froon y Kris Kremers», indica el comunicad.
«El embajador De Boer comunicó que posiblemente vendrán al país los familiares de Lisaane Froom a fin de coordinar la entrega de los restos óseos y pertenencias. Igual solicitud en su momento hicieron los familiares de Kris Kremers cuando estuvieron en Panamá», agrega el comunicado.
La Fiscalía panameña explica en el comunicado que Holanda le devolverá «en los próximos días las pertenencias que habían sido enviadas a ese país para ser analizadas».
Por su parte, según el boletín, «la procuradora Belfon expresó que se harán las coordinaciones necesarias para que se realice la entrega de las pertenencias y los restos óseos de forma inmediata y sin complicaciones a los familiares de Lissane Froom y Kris Kremers».
La comunicación de la Fiscalía panameña fue emitida después de que el lunes la familia de Kremers denunció en Holanda el silencio de las autoridades tanto neerlandesas como panameñas pese a las peticiones de los padres de la joven de conocer qué ocurrió con su hija.
Según un comunicado de la abogada de la familia Kremers, Nikki van Passel, el Instituto Forense holandés ha dado por finalizada la investigación, una información «contraria» a la dada a la familia por el Ministerio Público del país, que aseguraba que las pesquisas aún estaban en curso.
Por otro lado, la abogada aseguró que el embajador holandés en Panamá tenía ya desde hacía diez días en su poder las conclusiones de la investigación pero, según denunció, todavía no las había hecho llegar a las autoridades panameñas.
La consejera legal de la familia Kremers en Holanda también solicitó al Ministerio Público holandés que ponga los resultados de la investigación disponibles «en la medida de lo posible» digitalmente a disposición de las autoridades panameñas.
«Nos da la impresión de que están mareando la perdiz para tenernos apartados mientras que nosotros solo queremos saber lo que ha sucedido con nuestra hija y las circunstancias alrededor de su muerte», denuncia la familia a través del comunicado.
Para los padres de la joven desaparecida, «las partes implicadas en esta investigación parecen no mostrar ningún tipo de empatía, y al parecer tampoco pueden entender que excede los límites de la decencia el tratar de esta forma a las familias».
Entre las posesiones de las holandesas encontradas en la zona de la desaparición incluidas en el expediente del caso se encuentra un teléfono móvil, según confirmaron las autoridades, desde el que las jóvenes llamaron a los servicios de emergencia sin ser atendidas y se hicieron fotos en diferentes momentos de la expedición que nunca concluyeron.