Un total de 600 litros de insumos que se utilizarán para preparar un millón de dosis de la «Coronavac», la vacuna creada por el laboratorio chino Sinovac, llegaron este jueves a la ciudad brasileña de Sao Paulo, que espera poder comenzar a inmunizar a la población a partir de enero.
El lote se suma a las 120.000 dosis listas recibidas hace dos semanas. En total serán 46 millones de dosis adquiridas por el gobierno de Sao Paulo para atender a toda la población de esa región -la más afectada en números absolutos por la pandemia- y que terminarán de llegar en las próximas dos semanas.
La vacuna china, cuya producción y aplicación estará coordinada por el Instituto Butantan, el principal centro referente inmunológico de Brasil, aterrizó esta madrugada en el Aeropuerto Internacional de Guarulhos, en la región metropolitana de Sao Paulo, proveniente de un avión que despegó desde Pekín e hizo escala en Zurich, Suiza.
Antes de comenzar su fabricación en el Instituto, los insumos de la Coronavac se someterán a pruebas que evaluarán y validarán la calidad del producto y el proceso de producción.
Pero la vacuna china solo estará disponible para la población brasileña cuando sea verificada su efectividad, lo que debe ocurrir tras la conclusión de la tercera fase de los estudios clínicos, cuyos resultados serán divulgados próximamente, y la posterior aprobación por parte de la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa, regulador).
En ese sentido, Joao Doria afirmó en una rueda de prensa que la Gobernación paulista está cumpliendo «rigurosamente» el cronograma previsto para el desarrollo de la vacuna y aseguró que la inmunización en el estado de Sao Paulo tendrá inicio ya en enero.
«Observando rigurosamente la ley, cumpliendo el protocolo con la Anvisa y obedeciendo los principios de protección de la vida, vamos a iniciar la inmunización de los brasileños de Sao Paulo en enero», destacó.
Doria, un desafecto político del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, igualmente criticó el plan preliminar de inmunización presentado por el Gobierno central esta semana, según el cual el comienzo de la vacunación a nivel nacional estaría prevista para marzo de 2021.
«Es sorprendente esa indiferencia, ese distanciamiento, esa falta de compasión con la vida de los brasileños», espetó Doria, al indagar si «los miembros del Gobierno» no «registran el hecho de que hay más de 500 brasileños que mueren todos los días de covid-19 en Brasil».
En medio a las disputas políticas en torno a la Coronavac, el gobernador paulista reiteró que espera que el Ministerio de la Salud tenga «juicio» y cierre un acuerdo para que la vacuna producida por el Butantan igualmente sea distribuida y utilizada en otras regiones de Brasil.
«Si el Ministerio de Salud tiene juicio, competencia y la visión de que la vacuna debe ser para todos los brasileños, podrá ofrecer también a otros estados la Coronavac para inmunizar los brasileños», señaló el gobernador, al cuestionar el porqué de «iniciar una inmunización en marzo si podemos hacerlo ya en el mes de enero».
La Coronavac está en la etapa final de ensayos clínicos en humanos en Brasil y los resultados de efectividad deberán ser anunciados hasta el próximo día 15 de diciembre, según explicó el director del Butantan, Dimas Covas, en la rueda.
«Estamos en una carrera para su introducción lo más rápido posible para salvar el mayor número de vidas» y «necesitamos un programa de vacunación ágil capaz de disponer esas vacunas muy rápidamente», subrayó.