Con el solo hecho de llegar a la final los dos equipos argentinos ya se llevaron al bolsillo, US$1,8 millones; luego US$750 mil por afrontar los octavos de final; US$950 mil por los cuartos de final; y US$ 1,3 millones por las semifinales. Hasta el momento, sin jugar la final, ambos han percibido US$4,8 millones.
Cabe apuntar que otro de los puntos a destacar son los ingresos que han obtenido los clubes por la asistencia de los hinchas a los estadios. Así como la venta de camisetas, que aumentaron drásticamente por la denominada final del siglo.
Otro de los caminos con los que los dos equipos más grandes de Argentina obtendrán utilidades es con la valorización de sus jugadores. Lo que valdrá una actuación consagratoria de alguno de ellos. El mundo entero tiene sus ojos volcados en este partido.
Por el lado de Boca, sus dos próximas ventas millonarias al fútbol europeo llegarán con Cristian Pavón y Wilmar Barrios, de quienes esperan recibir alrededor de 40 millones de euros por cada uno. Un valor similar espera River por Exequiel Palacios, quien está muy cerca de recalar en el Real Madrid.
También se juegan la participación al Mundial de Clubes, certamen en el que tendrían una hipotética final ante el Real Madrid y que, claramente, traerá millones de euros a las tesorerías de los clubes participantes.
Un partido que vale la gloria eterna, pero que también vale mucho más que eso: millones de dólares.