La Corte Suprema de Canadá está preparada para escuchar apelaciones en tres casos separados para determinar si la legislación federal sobre el impuesto al carbono es constitucional o si invade de manera inaceptable áreas de jurisdicción provincial.
Hasta el momento, los tribunales de apelaciones de Saskatchewan y Ontario confirmaron la ley, mientras que el Tribunal de Apelaciones de Alberta la declaró inconstitucional.
El caso de la Corte Suprema podría ser una decisión decisiva para uno de los pilares centrales de la agenda climática liberal del país.
Representa hasta el 40% de los recortes a las emisiones de gases de efecto invernadero necesarios para cumplir con las obligaciones de Canadá en virtud del acuerdo de París sobre el cambio climático firmado.
El caso se llevará a cabo durante dos días, incluidas las presentaciones de al menos siete provincias, el gobierno federal, la Asamblea de las Primeras Naciones y casi dos docenas de intervinientes que incluyen servicios provinciales, grupos ambientales y sindicatos.