Estados Unidos arrojó una declaración de desastre mayor para Puerto Rico tras paso del huracán Fiona, que tocó tierra en el suroeste de Puerto Rico el pasado domingo y dejó en la isla carreteras intransitables, áreas inundadas, viviendas destruidas y postes de electricidad caídos.
Esta declaración de desastre mayor activa las ayudas económicas de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias FEMA, para ofrecer asistencia de emergencia a los afectados por el Huracán.
Las ayudas pueden abarcar desde fondos para albergues temporales y reparaciones de vivienda, hasta préstamos de bajo costo para los hogares que no tienen asegurada su propiedad, declaró la Casa Blanca en un comunicado.
FEMA enviará, además, cientos de efectivos adicionales a Puerto Rico para responder a la emergencia y su administradora, Deanne Criswell, empezó en esta jornada a evaluar la situación sobre el terreno y determinar los recursos necesarios para apoyar su recuperación.
El gobernador del país, Pedro Pierluisi, quien hizo la petición a Estados Unidos para declarar estado mayor de desastre, aseguró que el territorio tendrá acceso a las ayudar de FEMA para recuperarse del Fiona.
Todavía no hay un estimado de los daños causados por Fiona sobre la isla ni se han determinado las víctimas mortales vinculadas directa o indirectamente con la tragedia, aunque estas superarían la decena.
El 73 % de Puerto Rico sigue sin luz tres días después del huracán Fiona, mientras que un 41 % de los abonados tampoco tiene servicio de agua.