TORONTO. Durante las últimas semanas hemos podido observar diversas actividades que muchos grupos comunitarios han estado realizando a propósito del Día Internacional de la Mujer, una fecha que sirve como celebración por todos los logros obtenidos por las mujeres alrededor del mundo, pero también como un llamado de atención de que aun hay mucho por hacer.
Uno de los grupos de mujeres que están en mas desventaja en el mundo son las mujeres inmigrantes, quienes sufren violencia no solamente en sus países de origen, sino que también en sus travesías por diversos países en busca de un lugar seguro donde poder vivir con sus hijos.
Es por eso por lo que el Ministerio de Inmigración, Refugiados y Ciudadanía de Canadá anunció este mes la “Política Pública Temporal sobre el Reasentamiento de Mujeres en México Sobrevivientes de Violencia Sexual y de Género”, con la cual se reconoce la vulnerabilidad de las mujeres refugiadas en México que han experimentado violencia sexual o de género y para quienes se necesita una solución duradera en Canadá.
Este programa está dirigido para mujeres de Centroamérica que se encuentran en México, principalmente en campos de refugiados, y que son sobrevivientes de violencia sexual o violencia de género.
Realmente hay muchísimos casos de mujeres de distintos países de Centroamérica que sufren violencia doméstica y que se escapan no solamente de sus hogares, sino que de sus países, buscando seguridad para ellas y para sus hijos. Y muchas de estas mujeres se encuentran en México, en campos de refugiados, tratando de encontrar un lugar donde puedan sentirse seguras. Y eso es algo que no es muy conocido, la cantidad de mujeres y de hombres con este mismo caso, que son perseguidos por su género o por su orientación sexual en el caso de la comunidad LGBTQ+, las cuales son razones para poder pedir refugio y ser declarado como refugiado de convenio.
El ministro de Inmigración de Canadá, Marc Miller, dice que las solicitudes de refugio de mujeres de Centroamérica ha estado muy bien documentadas por los organismos de Derechos Humanos, y que el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), ha establecido que las mujeres que se encuentran en esta situación en México, buscando llegar a los Estados Unidos o Canadá después de haber cruzado América Central, son muchas veces hechas blanco para secuestros, asesinatos y violencia sexual y de género. Es decir, que no solamente se están escapando de la violencia que sufrían en sus hogares, sino que durante todo el proceso de tratar de llegar a México para pedir asilo en Estados Unidos o en Canadá también sufren este mismo tipo de amenazas. Y que tienen muy poco acceso a vivienda, alimentos y a encontrar una manera para poder sobrevivir.
Según ACNUR, las mujeres que vienen del norte de Centroamérica (Guatemala, Honduras y El Salvador) tienen un riesgo mucho más alto de feminicidio que cualquier otra mujer que viene de otro país u otras regiones en el mundo.
En este sentido, el ministro Miller dice que “El Gobierno de Canadá reconoce la necesidad te tomar una medida regional para atacar a la migración forzada de Latinoamérica y el Caribe, incluyendo incrementar la protección de los grupos vulnerables como mujeres y niñas, y darles un lugar seguro por medio de un proceso de migración regular”.
Esta política migratoria va a durar tres años y durante ese periodo se van a procesar 100 solicitudes de una aplicante principal, es decir, van a ser 100 solicitudes del aplicante principal más los miembros de su familia que sean sus dependientes.
Para poder calificar, las mujeres deben estar en México y deben poder demostrar que son vulnerables y que han experimentado violencia de género o sexual, y que están necesitando una solución permanente a su situación.
Además, tienen que cumplir con los requisitos de un programa de inmigración que justamente es un programa de reasentamiento, y hay dos: uno es el de Refugiado de Convenio Fuera de Canadá (Convention Refugee Abroad class) y el otro es la clase País de Asilo (Country of Asylum class).
Para poder unirse a este programa, primero tienen que ser identificados por la firma de abogados internacionales Reed Smith LLP, quienes serán los responsables de revisar los casos y de identificar a las familias que calificarían bajo este programa. Después, el caso va a ser procesado en una especie de patrocinio por la organización Centro Canadiense para Víctimas de Tortura, que se encuentra en Toronto.
El Centro Canadiense para Víctimas de Tortura ha firmado un acuerdo con el gobierno federal para poder dar a los aplicantes y miembros de la familia dónde vivir, asistencia para reasentarse y asistencia financiera por un periodo de dos años. El programa se hace de acuerdo con una de las excepciones que existen en la Ley de Inmigración, que le da autorización por razones públicas al gobierno para hacer ciertas excepciones a las leyes de inmigración.
Para calificar, la persona tiene que hacer una solicitud para la residencia permanente como miembro de, como dije anteriormente, de una de las dos categorías legales, que son Convention Refugee Abroad class o Country of Asylum class. Tiene que identificarse como mujer, estar fuera de su país de nacionalidad y tiene que estar residiendo en México en el momento de hacer la solicitud. Además, tiene que demostrar que es sobreviviente de violencia sexual basada en el género, es decir que es mujer, y debe tener una carta de referencia firmada por la firma de abogados Reed Smith LLP. La carta de esta firma tiene que decir que la aplicante principal y su familia son elegibles bajo esta política pública, y que llenan todas las condiciones que son los requisitos de elegibilidad.
Una vez que se manda la solicitud al Departamento de Inmigración con esta información, el oficial en el consulado es quien determina si la persona califica o no. Y el Centro Canadiense para Víctimas de Tortura es el responsable de enviar la solicitud y hacerse cargo de esta familia durante dos años cuando ellos lleguen al país.
Por supuesto que aparte de cumplir con estos requisitos, también tienen que cumplir con los requisitos normales de cualquier inmigrante: Tienen que pasar exámenes médicos y tienen que demostrar que no son inadmisibles por razones criminales.
El programa todavía no está vigente sino que lo estará en el momento en que la firma de abogados y el centro para víctimas de tortura hayan firmado el memorándum de entendimiento con el gobierno canadiense.
A Propósito del Día Internacional de la Mujer, este es un excelente anuncio, porque en realidad las mujeres son un grupo súper vulnerable y lamentablemente muy poco entendido en muchos países del mundo, no solamente en países de Latinoamérica, donde en muchos de ellos no hay protección para las mujeres. Y aún en los países donde sí hay protección para las mujeres, en muchas ocasiones no son respetadas por las autoridades, por lo que se encuentran en mucha desventaja.
Yo sé que 100 casos es un número muy limitado si lo comparamos con el número de personas que sufren este tipo de violencia, pero aun así es un excelente indicio de que el gobierno sí reconoce que este es un problema a nivel mundial y que las mujeres necesitan protección. De hecho, en los casos presentados en Canadá, donde se demuestra que hay violencia de género, el nivel de aceptación es altísimo. Entonces, si bien 100 aplicaciones no parecen ser mucho, el mensaje que deja este programa es de muchísima importancia para las personas que están sufriendo este tipo de situaciones y que están pensando en pedir protección.