En las zonas cercanas a la frontera con Ecuador se vive un preocupante panorama. El país vecino presenta la peor crisis humanitaria por causa del avance del coronavirus siendo hasta ahora el más afectado en contagios y muertes per cápita de la región, algo que podría significar un gran problema para Colombia si no se toman los controles suficientes para frenar el tránsito ilegal de personas que continúa presentándose.
Esta situación ha llevado al Gobierno colombiano a militarizar la frontera, enviando 500 uniformados a reforzar los 586 kilómetros terrestres que comparte el país con Ecuador.
Pese a que los pasos fronterizos oficiales son cuatro: uno marítimo en el municipio de Tumaco; y tres terrestres, Soutiuño, San Miguel de Putumayo y el puente Internacional de Rumichaca, en Ipiales (Nariño), se calcula que por lo menos hay 36 pasos ilegales donde a diario transitan personas que entran y salen de los dos países.
Rumichaca es el principal paso entre Colombia y Ecuador, un punto que en situación de normalidad transitan unas 35 mil personas por mes entre nacionales y extranjeros, según información suministrada por Migración Colombia promediando los pasos migratorios de enero y febrero de este año.
Pero esta frontera está cerrada desde el pasado 16 de marzo, dos días después de que Ecuador hiciera lo propio de su lado del puente, ante el abrumador avance del coronavirus en ese país, el cual sumaba ya cerca de 4.000 mil casos positivos y 200 personas fallecidas.
El SOS comenzó a principios de semana, el lunes 30 de marzo, cuando el Gobernador de Nariño, donde está el Puente de Rumichaca, envió una comunicación al Gobierno Nacional alertando que “el coronavirus está llegando por la frontera”.
Reclamaba el gobernador Rojas que la atención solo estaba puesta en la frontera con Venezuela pero que la situación en Nariño era tan grave que tenía en peligro a por lo menos 630 mil personas con riesgo de ser infectadas.
“Muchos hermanos ecuatorianos están buscando la forma de huir de su país por la manera en la que ha avanzado el virus en su territorio, y eso hace que una de sus válvulas de escape sea la frontera. Además, su economía se mueve en dólares, por lo que traer sus recursos a Colombia les resulta rentable para subsistir. Tenemos que evitar la propagación sin límite del covid-19 desde Ecuador”, alertaba preocupado el Gobernador en entrevista con El Tiempo.
A su clamor se sumó la petición de la Procuraduría Colombiana en la voz del procurador Fernando Carrillo que recomendó fortalecer el funcionamiento de los Equipos de Reacción Inmediata en la franja limítrofe y dotar a Nariño de muestras para la detección del virus, así como el aumento del pie de fuerza y la construcción de hospitales de campaña.
Militares a la frontera.
El jueves pasado llegaron a Ipiales (Nariño) 500 unidades del Ejército para reforzar el pie de fuerza y respaldar las labores de seguridad en la frontera.
Ese mismo día las autoridades civiles y militares el Colombia y Ecuador se reunieron para trazar u plan conjunto de acción. La primera conclusión de esta reunión fue reconocer la existencia de por lo menos 36 pasos ilegales entre ambos países que son usados por para el tránsito irregular de personas.