El Consejo de Seguridad de la ONU y el secretario general, Ban Ki-moon, condenaron hoy los atentados terroristas múltiples registrados este domingo en Mogadiscio, la capital de Somalia, que dejaron numerosos muertos y heridos.
«Condenamos en los términos más enérgicos los atentados terroristas de ayer en Somalia, cuya autoría se ha atribuido (la milicia radical islámica) Al Shabab», dijo en un comunicado la presidencia del Consejo, que ostenta Ruanda el mes de abril.
Los miembros del máximo órgano de decisión de la ONU extendieron sus condolencias a los familiares de las víctimas, y al Gobierno y al pueblo de Somalia, así como al Gobierno de Turquía por los tres ciudadanos de su país heridos en los atentados.
«Mientras Somalia continúa progresando para alcanzar una mayor paz y estabilidad, es deplorable que sus ciudadanos y los de la comunidad internacional que apoyan esos progresos, estén en el punto de mira de quienes quieren prevenir la paz», indicó el Consejo.
Así, tras reafirmar que el terrorismo en todas sus formas es una amenaza para la paz y la seguridad internacional, reiteró que es «injustificable» sin importar cuales sean sus motivaciones «donde sea, cuando sea y por quien quiera que lo haya cometido».
El Consejo mostró su disposición a actuar contra quienes amenacen la paz, la estabilidad y la seguridad de Somalia y reiteró su apoyo a los esfuerzos de reconciliación, incluido el «inminente» envío de una nueva misión especial política al país.
Por su parte, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, condenó también los ataques, que calificó de «atentados terroristas descarados», y trasladó sus condolencias a los familiares de las víctimas y rindió tributo a su misión en ese país AMISOM.
«El secretario general confía que estos devastadores ataques no descarrilen la determinación del pueblo somalí de alcanzar la paz y la seguridad en su país», añadió Ban, que reiteró el compromiso de la ONU con el gobierno y las instituciones de Somalia.
Al menos 17 personas murieron este domingo y un número similar resultaron heridas en varios ataques perpetrados en la capital somalí, atentados que se atribuyó Al Shabab a través de un mensaje en Twitter.
Somalia vive en un estado de guerra y caos permanente desde 1991, tras el derrocamiento del dictador Mohamed Siad Barré que dejó al país sin un gobierno medianamente efectivo y en manos de milicias radicales islámicas, señores de la guerra y bandas de delincuentes.
Pese a los avances en el terreno político logrados el pasado año, el nuevo ejecutivo todavía no cuenta con un control absoluto del territorio somalí, donde en amplias zonas del centro y el sur domina Al Shabab.
Unidas, 15 abr (EFE).-