Elementos palestinos pertenecientes al Frente Popular para la Liberación del Comando General Palestino (PFLP-GC por sus siglas en ingles) y del Ejército de Liberación de Palestina (ELP por sus siglas en español) junto al grupo político-terrorista libanés Hezbollah entrenaron a terroristas chiítas bahreiníes, yemenitas y grupos de venezolanos de las Fuerzas Populares Venezolanas creada por el dictador latinoamericano Nicolás Maduro y conocidas como «Colectivos» en campamentos cercanos a Damasco.
A través de fuentes de un grupo de oficiales disidentes sirios auto-exiliados en Líbano y Egipto se conoció un comunicado que publicó el diario árabe Al-Hayat con sede en Londres. El comunicado de los militares que abandonaron el ejército sirio indica que el régimen de Assad y el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (IRGC por sus siglas en inglés) supervisaron y financiaron el entrenamiento de terroristas islámicos y latinoamericanos.
El comunicado de los militares sirios, que abandonaron el ejército por no aceptar lo que consideraron ordenes inmorales de represión, tortura, desaparición y crímenes de personas inocentes que nada tenían que ver con terrorismo contra el régimen sirio, denuncia con detalles cientos de delitos cometidos por el ejército que cumplía órdenes de masacrar gente inocente impartidas por Maher Al-Assad (hermano del presidente Bashar Al-Assad) también indica que el Frente para la Liberación del Comando General Palestino y el Ejército de Liberación de Palestina se mantuvieron leales a Irán y al régimen de Assad durante los siete años de guerra civil siria, y trabajaron arduamente en el entrenamiento y la capacitación de elementos yihadistas provenientes de Yemen, Bahrein y un grupo de unos 200 venezolanos pertenecientes a las milicias populares del régimen de Caracas.
Según el comunicado de los militares sirios disidentes publicado por Al-Hayat. La embajada de Irán en Damasco proporcionó apoyo logístico y material para el entrenamiento terrorista. Y el líder de la Fuerza Al-Quds de la Guardia Revolucionaria Islámica, el general de división Qasem Soleimani, tenía conocimiento de ese tipo de actividades.
Aunque los tres gobiernos negaron el informe, especialmente el régimen venezolano que se refirió a él como «una burda mentira montada por el imperialismo que está atacando desde hace años a Venezuela» cuando fue contactado por el diario árabe antes de la publicación, lo cierto es que el documento denuncia con detalles que los terroristas fueron capacitados también en la fabricación y uso de explosivos y que el entrenamiento de todos ellos se llevó a cabo en un territorio controlado por el régimen cerca de Damasco para evitar a los agentes de inteligencia occidentales y árabes establecidos en Irak y el Líbano. El entrenamiento previo de Hezbollah tuvo lugar en el valle de Bekaa en el Líbano y se centró en tácticas de combate urbano y secuestro de personas.
Los terroristas musulmanes comenzaron a ser entrenados desde 2008, en grupos de entre 15 a 30 combatientes. Los venezolanos hicieron su entrenamiento exclusivamente en el Valle del Bekka y llegaban en grupos de 50 a 70 hombres. Al menos cuatro grupos de venezolanos llegaron al Líbano vía Irán entre 2014 y 2017. «Según información que disponemos y a la que calificamos de muy creíble, todos ellos, yemenitas, bahreiníes y venezolanos, están continuando con otros cursos en el Líbano e Irán», dijo a Al-Hayat un vocero de los oficiales sirios desde Egipto.
Irán ha estado involucrado por muchos años en la desestabilización de Bahrein, su vecino del Golfo Pérsico. Los funcionarios de Bahrein arrestaron a 116 personas por cargos de terrorismo, por planear ataques contra funcionarios del gobierno en marzo pasado y acusaron a la Guardia Revolucionaria de Irán de estar detrás de esa red terrorista de Bahrein. Un año antes de esos incidentes, el comandante de la Guardia Revolucionaria de Irán, general Saeed Qasemi, declaro que Irán debería anexar a Bahrein y convertirla en una provincia iraní.
El mes pasado, las autoridades de Bahrein detuvieron a 169 personas acusándolas de intentar formar un partido político-militar denominado «Hezbollah de Bahrein». Las investigaciones y las declaraciones de los detenidos dieron cuenta que contaban con la colaboración y financiamiento del Vezarat-e Ettela’at va Amniyat-e Keshvar (Ministerio de Inteligencia de Irán, conocido como VEVAK o inteligencia oficial iraní).
Sin embargo, la justicia militar de Bahrein pudo acreditar por medio de sus agentes infiltrados en los viajes que cientos de jóvenes de Bahrein efectuaban a la ciudad santa chiíta iraní de Qom, bajo el pretexto de una peregrinación religiosa que, desde allí, esos jóvenes eran enviados a unirse a los campamentos dirigidos por la Guardia Revolucionaria khomeinista. Respecto de los bahreiníes entrenados en Siria, la publicación del diario árabe indica que el liderazgo militar de Irán presionó a Assad para que les permitiera entrenarlos en Siria para evadir la detección de los servicios de inteligencia extranjeros.
En dirección a los grupos venezolanos, los oficiales sirios disidentes informaron que, en todos los casos, los latinoamericanos hicieron la totalidad de su entrenamiento en Líbano, generalmente en zonas donde la autoridad del gobierno no tiene alcance y el territorio es dominado y gobernado de facto por Hezbollah, como el Valle de Bekka, aunque algunos de ellos fueron llevados a Siria para adquirir experiencia de combate urbano en pueblos y ciudades cercanas a Damasco cuando el Estado Islámico (ISIS por sus siglas en Ingles) comenzó a replegarse de esos sitios. Según indica el comunicado, se ratifica la evidencia y el claro ejemplo de cómo Irán y Siria se han convertido en la base del poder terrorista que excede la región del Oriente Medio y proyecta un impacto impredecible en el continente latinoamericano.