El Gobierno de Canadá dijo hoy que los resultados del referendo celebrado en las islas Malvinas «son claros» y que «sólo» los habitantes del territorio son los que pueden decidir sobre su futuro.
«Con referencia al voto del lunes, nuestra posición es que solo la gente de las islas Falkland (el nombre de las Malvinas en el Reino Unido) puede determinar su futuro. Los resultados fueron claros», indicó el ministro de Asuntos Exteriores de Canadá, John Baird, en su cuenta de Twitter.
El 99,8 % de los malvinenses dijo «sí» a continuar como territorio dependiente del Reino Unido y solo 3 votos fueron para el «no» en un referendo celebrado los días 10 y 11 de marzo.
El Gobierno argentino, cuya relación con el Reino Unido atraviesa por un momento muy bajo, ha dejado claro que no aceptará esa consulta, que considera ilegal.
Las palabras de Baird son similares a las que ayer expresó el Ejecutivo estadounidense, que señaló que el resultado mostraba «claramente» la voluntad de los isleños de seguir ligados al Reino Unido.
Aunque Washington reconoció ayer «que existen demandas encontradas» algo que hoy Ottawa omitió.
Durante la última Cumbre de las Américas, celebrada en Colombia, el primer ministro canadiense, Stephen Harper, impidió que las demandas argentinas sobre las Malvinas fueran incluidas en el comunicado final de los jefes de Estado.
Baird también señaló en una entrevista concedida en agosto de 2012 al periódico Wall Street Journal que Ottawa había resistido las presiones de importantes compañías canadienses, como el mayor productor de oro del mundo, Barrick Gold, para que cambiara su posición sobre el referendo.
Canadá es una monarquía constitucional, cuyo jefe de Estado es la reina Isabel de Inglaterra.
Desde la llegada al poder en 2006 del Partido Conservador de Harper, Canadá ha aumentado progresivamente la importancia de la figura de la monarca británica en la vida política y social del país, invirtiendo la tendencia de Gobiernos anteriores.
Toronto (Canadá), 13 mar (EFE).-
