La primera ministra británica, Theresa May, trasladó hoy a su homólogo húngaro, Viktor Orbán, que «quiere y espera proteger el estatus» de los ciudadanos de la Unión Europea (UE) en el Reino Unido tras el «brexit».
Durante un encuentro bilateral en el 10 de Downing Street, despacho oficial de la primera ministra en Londres, May subrayó que, recíprocamente, los Veintisiete socios europeos restantes deberán «proteger en retorno» a los británicos en la UE, detalló un portavoz oficial de May.
La jefa del Gobierno británico resaltó la «fortaleza» de la relación entre Londres y Budapest, y mostró su confianza en que ésta «se mantendrá una vez el Reino Unido haya abandonado la UE».
May aseguró a su colega húngaro que mantiene su intención de activar antes de abril el artículo 50 del Tratado de Lisboa, que inicia de forma oficial el periodo de dos años de negociaciones para romper lazos con Bruselas.
Como ya trasladó la semana pasada al presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, a la canciller alemana, Angela Merkel, y otros colegas europeos, May confía en que el Tribunal Supremo revocará en diciembre la sentencia que obliga a su Gobierno a pedir permiso al Parlamento para activar el «brexit», lo que amenaza con retrasar el proceso.
Orbán, que ha mantenido una línea dura sobre la inmigración y los refugiados en Europa, visitó Londres un día después de fracasar en su intento de prohibir la llegada de refugiados a su país sin autorización explícita del Parlamento.
Respecto a la inmigración, May mantuvo en la reunión que «deberíamos asegurar que los refugiados son acogidos en el primer país seguro de tránsito», relató su portavoz.
La primera ministra recalcó además que se debe «distinguir entre refugiados y migrantes económicos» y que «todos los Estados tienen derechos y responsabilidades a la hora de controlar sus fronteras y aceptar inmigrantes ilegales retornados».
Londres, 9 nov (EFE).-
