Un estudio elaborado por la Unión Europea de Geólogos y difundido por la revista The Cryosphere concluyó que los glaciares bolivianos encogieron un 43 % entre 1986 y 2014, una tendencia que seguirá su curso si continúa el aumento global de las temperaturas.
El catedrático de la Universidad Metropolitana de Manchester (Reino Unido) y coordinador del estudio, Simon Cook, alertó que el retroceso de los nevados «deja tras de sí lagunas que pueden desbordarse llevándose por delante pueblos e infraestructuras situados aguas abajo».
El informe señala que esta circunstancia también amenaza el abastecimiento de agua para consumo, riego y producción de energía hidroeléctrica, ya que por ejemplo entre el 15 % y el 30 % del abastecimiento de agua al área de La Paz y El Alto, que supera 2 millones de habitantes, procede del deshielo estacional.
Los geólogos midieron el área ocupada por los glaciares en el país andino utilizando imágenes captadas por el satélite Landsat, del programa de observación de la tierra del Servicio Geológico de Estados Unidos y la NASA.
De esta manera, concluyeron que la superficie que ocupan los glaciares bolivianos disminuyó desde 530 kilómetros cuadrados en 1986 hasta 300 kilómetros cuadrados en 2014.
El equipo investigador alertó del peligro que un eventual desborde de las lagunas puede traer, especialmente para zonas aisladas.
En este sentido, el estudio identificó diversas lagunas y embalses que corren este riesgo, pero señaló que se sabe poco de las consecuencias de estos fenómenos, llamados «inundaciones catastróficas», así como de las consecuencias del deshielo para el abastecimiento de agua.
El investigador del Instituto Boliviano de la Montaña y coautor del estudio Dirk Hoffmann, documentó en 2009 una inundación de estas características en el área montañosa de Apolobamba, que causó muerte de ganado, destrucción de cultivos y la incomunicación de un pueblo durante meses por la destrucción de una carretera.
«Al ser localidades muy aisladas, alejadas de ciudades, las autoridades a nivel nacional y la población en general no son conscientes de los peligros a los que se enfrentan estas comunidades de montaña a causa del cambio climático y no se están tomando las medidas adecuadas», lamentó Hoffman en declaraciones a Cryosphere. La Paz, 20 oct (EFE).-