La enfermera británica Pauline Cafferkey, ingresada hoy por cuarta vez desde que contrajo el ébola cuando trabajaba en Sierra Leona, en 2014, ha dado negativo en las pruebas para detectar el virus en su organismo.
Cafferkey, de 39 años, fue trasladada esta mañana desde su domicilio al hospital Queen Elizabeth University de Glasgow (Escocia), a donde llegó escoltada por la policía.
«Debido al historial médico de Cafferkey, se han tomado medidas de precaución mientras se hacen más exámenes en profundidad. Estamos satisfechos de comunicar que los test para el ébola han dado negativo», afirmó en un comunicado un portavoz del sistema de salud escocés.
La enfermera permanece ingresada en el centro médico «en una condición estable» y «no supone un riesgo para la población», subrayó ese portavoz.
En enero de 2015, la enfermera fue dada de alta del Royal Free Hospital de Londres, que cuenta con una unidad especializada, donde recibió un tratamiento experimental antivírico elaborado con plasma sanguíneo de otro enfermero británico, Will Pooley, que ya había superado la enfermedad.
Sin embargo, fue readmitida en diferentes hospitales otras dos veces, en octubre de 2015 y febrero de 2016, después de sufrir complicaciones derivadas del virus que la pusieron en estado crítico.
Londres, 6 oct (EFE).-
