En Canadá, la información personal que se encuentra en el sistema de salud de cientos de pacientes es violada cada año, pero la mayoría de los canadienses viven en provincias donde los prestadores de servicios de salud, no lo dan a conocer a sus víctimas.
Una investigación de una cadena de noticias canadiense, encontró que seis provincias, que tienen una población de aproximadamente 20 millones de personas, no poseen una legislación que requiera que los hospitales, médicos y otros profesionales de la salud, notifiquen a los pacientes sobre una violación de sus archivos médicos.
Willa Magee de Shelburne, NS, recibió un aviso de incumplimiento de privacidad por parte de la Autoridad de Salud del Distrito Suroeste Nova Escocia en junio de 2012. Ella es ahora parte de una demanda colectiva en contra de la autoridad sanitaria.
«Creo que es muy personal. Incluso si usted no tiene una terrible enfermedad, es sólo personal,» dice ella. » Usted cuando va a un profesional de la salud considera que lo que dice que les va a realizarse en la confianza de una manera u otra», indicó Magee
En la primavera de 2012, Magee recibió una carta emitida por la nueva Autoridad de Salud del Distrito Suroeste, donde le comunicaba que estaba entre los 707 pacientes cuya privacidad había sido violada.
Magee vive en una provincia donde los hospitales están obligados a notificar a las personas sobre violaciones graves de su información registradas en el sistema de salud.
Una violación puede ser que alguien haya enviado, de manera accidental, información sobre los registros médicos, a un destino equivocado, o también que una persona robe esa información y la venda.
Se conoció, que en el caso de Magee, un empleado estaba «fisgoneando”, y consiguió acceso indebido a sus registros médicos.