El Ministerio Público (MP) de Panamá informó hoy que una misión de fiscales viajará a Brasil para tratar las asistencias judiciales que se han solicitado ambos países, en relación con el caso Lava Jato, la mayor operación contra la corrupción en la historia del país suramericano.
Fiscales de Anticorrupción y Asuntos Internacionales, junto al Subsecretario General del MP, se trasladarán como una medida «excepcional, porque la regla consuetudinaria es que los fiscales interesados de cada país (…) viajen a nuestro país a buscar la información y/o los elementos de convicción necesarios para sus investigaciones», apuntó el organismo en un comunicado.
Pero los panameños aprovecharán la oportunidad para tratar con sus homólogos brasileños una petición de asistencia a ese país, sobre un caso no precisado por la fuente oficial.
«Decidimos tomar esta iniciativa para avanzar en los temas de interés para ambos Ministerios Públicos y como una muestra de buena voluntad, transparencia, eficacia y efectividad en el intercambio de la información», apuntó el MP, sin precisar fechas, después de que en medios locales panameños se dijera que el organismo se negaba a ayudar a Brasil.
El pasado 22 de septiembre, el MP o Procuraduría General de la Nación, pidió a Brasil precisar su requerimiento de asistencia relacionada con el caso Lava Jato.
En ese momento, el secretario general de la Procuraduría, Rolando Rodríguez, dijo que los requerimientos de la petición tenían que ser pormenorizados «toda vez que pudieran en un momento dado afectar el derecho de un tercero que no está involucrado».
Agregó que de manera «reiterada y formal» se instó directamente a los fiscales de Brasil que hicieron la solicitud que vinieran a Panamá para brindarles la información, sin que esto sucediera.
El caso Lava Jato (Lavado de coches), que en marzo pasado cumplió dos años como la mayor investigación policial de la historia de Brasil, involucra, entre otros, al expresidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva y a la empresas brasileñas Petrobras y Odebrecht, esta última partícipe del consorcio que construyó en Panamá la primera línea del metro y que trabaja en la segunda.
El exmandatario, denunciado por corrupción y lavado de dinero, fue acusado por la Fiscalía de ser el «máximo comandante» de la red corrupta que desvió millones de la petrolera estatal Petrobras entre 2004 y 2014, por la que ya fueron condenados políticos, ejecutivos de la petrolera y directivos de la compañía.
Los fiscales brasileños supuestamente pidieron asistencia judicial a las autoridades panameñas para obtener información sobre el movimiento de cuentas bancarias abiertas en este país y que pueden haber sido utilizadas por la constructora Norberto Odebrecht para pagar sobornos a autoridades de varios países donde ejecutan obras, entre ellos Panamá, según versiones de la prensa local.
El MP panameño también trabaja en una asistencia judicial solicitada por Suiza por posibles actos de soborno que vinculan al expresidente Ricardo Martinelli (2009-2014) y a sus hijos en la investigación que se le hace a Odebrecht en el país europeo, de acuerdo con una investigación del canal local TVN.
Martinelli, quien vive en Miami (EE.UU.), tiene abiertas seis investigaciones en la Corte Suprema de Justicia de Panamá, que lo requiere internacionalmente para que comparezca en un caso sobre escuchas ilegales durante su mandato.Panamá, 26 sep (EFE).-