Después de casi 10 años alejado de los escenarios y estudios de grabación de Cuba, el salsero Issac Delgado presentó una faceta musical renovada en su nuevo álbum, «Made in Habana», el primero que graba en la isla tras su ausencia y que define como una «carta de presentación al público joven».
Delgado, una de las figuras más importantes de la música popular bailable en la isla, emigró a EE.UU. en 2006 y estuvo prácticamente vetado en la radio y la televisión cubana hasta que regresó hace unos dos años para «reactivarse», sobre todo a través del contacto con un público que nunca lo olvidó, según aseguró a Efe.
Sin embargo, el conocido como «El Chévere de la Salsa» no se conformó con alimentar la nostalgia de los bailadores que llenaban salones en los años 80 y 90, y quiso atraer a una nueva audiencia, algo que se nota en su nueva producción.
«En mi primer año acá traté de acercarme a los jóvenes (…) Ahora yo me siento súper identificado con lo que está sonando. Siempre he vivido en paralelo con las corrientes musicales que están sonando en Cuba y creo que de eso se trata la música, de incorporar lo bueno de todo lo que esté sonando alrededor de uno», sostuvo.
Bajo el prestigioso sello cubano Egrem, «Made in Habana» combina la «salsa pura», el sonido elegante que caracteriza el trabajo de Delgado, con la «timba», la versión más temperamental de este género, que tuvo su auge en la década de 1990 con agrupaciones como «NG la Banda», de la formó parte este músico.
«Creo que lo más importante de todo esto es que el producto final es un producto cubano. Suena cubano totalmente. Abarcamos sonidos de siempre como el chachachá, el mambo, pero todo mezclado. Se ve que hay tradición dentro del disco, aunque siento que es muy 2016», señaló el intérprete de «Necesito una amiga».
Entre los invitados cubanos del álbum, que verá la luz en agosto, están la legendaria orquesta «Los Van Van», el trompetista Alexander Abreu, el creador del súper éxito «Bailando», Descemer Bueno, y Ricardo Leyva junto a su banda «Sur Caribe», que aporta el ritmo caribeño propio de Santiago de Cuba.
Además, incluye una colaboración «especial» de Issac Delgado con el colombiano Willy García, exintegrante del grupo de salsa «Niche».
«Es una carta de presentación al público joven y es muy de la calle, es un disco muy fácil para los bailadores», destacó Delgado, quien mantiene el «cuidado con las letras» que distingue a sus composiciones.
Para promover «Made in Habana» el cantante prevé ofrecer un concierto en el emblemático «Salón Rosado de La Tropical» en La Habana y actuar frente al público europeo, para lo que prepara una gira para fines de año por las principales capitales de ese continente.
La gira incluirá paradas en unas cinco ciudades españolas, avanzó Delgado.
Ante el creciente entusiasmo de grandes figuras de la música internacional por presentarse en la otrora «isla prohibida», Delgado se muestra encantado y subraya la ventaja de las recientes colaboraciones de músicos cubanos con famosos de todo el mundo, que ayudan a «enriquecer y promocionar lo que se hace en el país».
Uno de los ejemplos más recientes fue el histórico concierto gratuito que los Rolling Stones ofrecieron en La Habana en marzo pasado, algo inédito en décadas.
El «Chévere de la Salsa» confiesa que tiene la deuda de cantar en algún escenario cubano con el salsero puertorriqueño Gilberto Santarosa, uno de los músicos «queridos por el pueblo cubano» y a quien no ha visto en directo.
Además, agrega, se quedará con «esa especial sensación espiritual que tan importante es también para el artista».
«Cuba siempre ha estado de moda, y ahora que (los músicos) tienen la oportunidad de llegar, van a haber muchas sorpresas yo creo. Se están cocinando muchas cosas», aseguró.
Yeny García
La Habana, 23 jul (EFE).-