Bogotá, 18 mar (EFE).- El expresidente colombiano Álvaro Uribe pidió hoy a la comunidad internacional que proteja a su exministro de Agricultura Andrés Felipe Arias, prófugo de la Justicia desde el pasado julio, cuando fue condenado a 17 años de prisión por un caso de corrupción.
La situación de Arias, conocido como «uribito» por su cercanía con el expresidente y ahora senador, se volvió más delicada este martes, cuando la Corte Suprema de Justicia de Colombia solicitó a la Interpol que emitiera una circular roja en su contra.
Ante este requerimiento, Uribe pidió a la comunidad internacional «preservar la protección» de Arias, a quien considera una «víctima de la persecución política judicial» que, afirmó, padecen quienes integraron su Gobierno (2002-2010).
En una carta publicada en la página web el partido de derechas Centro Democrático, que fundó tras dejar la Presidencia, sostiene que la petición de circular roja contra el exministro «demuestra» que en Colombia «las normas internacionales se aplican selectivamente, de acuerdo con la filiación política de la persona».
Por este motivo, reitera «el pedido de protección internacional al exministro Arias y a nuestros compañeros, víctimas de persecución política de la Justicia» colombiana.
El exministro fue condenado en julio pasado por la Corte Suprema de Justicia de Colombia a 17 años y medio de prisión y a pagar una multa de 25.000 millones de pesos (unos 13 millones de dólares) por entregar subsidios agrarios a familias adineradas en lugar de a campesinos afectados por el Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos.
Tras ser declarado culpable de apropiación indebida a favor de terceros, Arias salió de Colombia, presumiblemente a Estados Unidos.
La sentencia contra el exministro no es el único caso que azota a exmiembros del Gobierno Uribe.
También se encuentra fuera de Colombia el que fue alto comisionado de Paz bajo su Presidencia, Luis Carlos Restrepo, que buscó refugio al parecer en Canadá tras ser acusado de organizar el montaje de una falsa desmovilización de 62 guerrilleros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en 2006.
Por otro lado, la directora en aquella época de los servicios de inteligencia, María del Pilar Hurtado, fue hallada culpable por la Corte Suprema de Justicia de una trama de seguimientos y escuchas ilegales a periodistas, magistrados, congresistas y defensores de derechos humanos.
Uribe se refirió a ellos en su carta, donde destacó que casos como estos «tienen en trámite una acusación ante las Naciones Unidas» sobre la que no aportó más detalles.