El Barcelona se apropió de, al menos, medio título de Liga con su triunfo ante el Atlético de Madrid (4-1), en tanto que el Real Madrid desertó de las mínimas opciones que tenía al ceder un empate ante el Espanyol (2-2).
El conjunto de Tito Vilanova continuó con su marcha espectacular y sumó ante su rival más directo la decimoquinta victoria en dieciséis partidos en la presente Liga. Su ventaja, ahora, es de nueve puntos sobre el cuadro del argentino Diego Pablo Simeone y de trece respecto al Real Madrid.
Pese a que queda más de media temporada, a que no ha llegado aún la Navidad, la diferencia es demasiado amplia para pensar en otra cosa que no sea la corona barcelonista de no mediar una hecatombe en el Camp Nou.
No lo tuvo fácil al principio el Barcelona. De hecho, el Atlético de Madrid fue superior en la primera media hora y soñó con reabrir la lucha y convertirse en una auténtica alternativa.
El colombiano Radamel Falcao envió primero un balón al palo derecho de la portería de Víctor Valdés, luego cruzó demasiado otro y a los 31 minutos convirtió un gol de ‘crack’ al escaparse de Gerard Piqué en velocidad y elevar con clase por encima del meta barcelonista.
Era el premio al juego atrevido y a la vez solidario de los rojiblancos ante un Barcelona a su merced, incapaz de desplegar su fútbol. Pero para su fortuna, tan solo cinco minutos después se encontró con un auténtico golazo del brasileño Adriano Correia (m.36), que enganchó, cerca de la esquina del área un tremendo zurdazo que se coló irremisiblemente junto a la escuadra derecha de la portería atlética.
El empate despertó al Barcelona y desequilibró al Atlético. Comenzaron los azulgrana a manejar el partido a su gusto y justo antes del descanso dieron otro mazazo a su rival con un tanto de Sergio Busquets, que resolvió con clase un lío en el área visitante a la salida de un córner.
El golpe de gracia definitivo lo dio, a los 57 minutos, el de siempre, Leo Messi, que agrandó su récord anual con un preciso zurdazo desde fuera del área que se coló junto al poste derecho del belga Thibaut Courtois. Incluso aprovechó un ‘regalo’ al final para firmar el definitivo 4-1.
El Real Madrid se dejó otro pedazo de título en el Santiago Bernabéu al ceder un nuevo empate ante el Espanyol de Javier Aguirre. La distancia respecto al Barcelona ya son palabras más que mayores. Trece puntos. Hasta Jose Mourinho admitió que la Liga «está casi imposible».
Jugó mal el conjunto del luso, pero tuvo la victoria en su mano y pudo incluso golear, pero no tuvo acierto y se topó con varias grandes intervenciones del meta Kiko Casilla, quien mantuvo a su equipo en el partido.
Sergio García adelantó a la media hora al necesitado conjunto espanyolista, pero los portugueses Cristiano Ronaldo, en la prolongación del primer tiempo, y Fabio Coentrao, al inicio del segundo, fraguaron la remontada madridista.
No mató el partido el Real Madrid y al final otro fallo en una acción a balón parado la aprovechó el uruguayo Juan Ángel Albín para firmar el 2-2 y dejar k.o. al conjunto de Mourinho, al que le queda como gran objetivo para esta temporada la Liga de Campeones de no mediar un milagro en forma de hundimiento barcelonista.
El Levante sigue empeñado en consolidarse en la zona europea. Lo confirmó con un nuevo triunfo, esta vez ante el Zaragoza en La Romareda por 0-1, con gol de Rubén, lo que le deja provisionalmente quinto a tan solo un punto del Málaga. El Betis podría superarle mañana si vence en Vigo al Celta.
El conjunto valenciano, que no pierde lejos del Ciutat de Valencia desde el 30 de septiembre, se tomó además la revancha de la derrota sufrida el pasado jueves en la Copa del Rey con un partido muy serio y con un gran trabajo defensivo.
Por contra, el Valencia dio otro paso atrás. El Rayo Vallecano, con un postrero tanto de penalti del argentino Alejandro ‘Chori’ Domínguez, asaltó Mestalla (0-1) y cortó en seco el efecto que había tenido la llegada al banquillo de Ernesto Valverde.
El Rayo sube a la novena posición y acumula 22 puntos, los mismos que la Real Sociedad, y uno más que Valladolid, Valencia y Athletic, que ahondó la crisis del Mallorca con su triunfo el sábado en Palma (0-1) con un gol de Aritz Aduriz.
El conjunto balear de Joaquín Caparrós no levanta cabeza y marca el inicio de la zona de descenso con trece puntos, empatado con el Granada, y con dos de ventaja sobre el colista Deportivo, que recibirá mañana al Valladolid, y con uno respecto al Espanyol.
José Antonio Pascual.
