El expresidente sudafricano y premio Nobel de la paz Nelson Mandela ha progresado durante el último día ingresado en un hospital de Pretoria y está respondiendo de forma satisfactoria al tratamiento al que se le está sometiendo para sanar una recaída de una infección pulmonar previa.
«Los médicos que atienden al expresidente Mandela han informado de que ha hecho progresos durante las últimas 24 horas y de que están satisfechos con cómo está respondiendo al tratamiento», informó hoy la Presidencia de Sudáfrica.
«Seguimos solicitando que se conceda el espacio y la privacidad necesaria a Madiba (nombre del clan de Mandela en lengua xhosa con el que se le conoce cariñosamente) y a su familia», agregó el breve texto, firmado por el portavoz presidencial, Mac Maharaj.
El pasado sábado, Mandela fue ingresado en un centro hospitalario de la capital sudafricana, para «someterle a unas pruebas», aunque Maharaj, antiguo compañero de prisión del icono de la lucha contra el régimen segregacionista sudafricano, precisó que «Madiba está bien» y que «no hay motivos para alarmarse».
El pasado día 9, Zuma visitó a Mandela en el hospital, a quien encontró «tranquilo y bien atendido».
«El expresidente Mandela (que el pasado 18 de julio cumplió 94 años) recibirá atención médica de vez en cuando, lo cual es normal a su edad», apuntó Maharaj en un comunicado emitido en el momento de su ingreso.
Mandela, primer presidente negro de Sudáfrica, luchó durante 67 años contra el régimen de segregación racial del apartheid, impuesto por la minoría blanca sudafricana hasta su elección como gobernante en 1994.
El pasado 18 de julio, el exmandatario celebró su 94 cumpleaños en la localidad oriental de Qunu, donde pasó su infancia.
El expresidente reside de manera habitual en Qunu, y ha regresado a Johannesburgo sólo para someterse a revisiones médicas.
Es la tercera vez que Mandela es hospitalizado en los últimos dos años, aunque se encuentra bajo permanente vigilancia médica en su residencia de Qunu.
