La Habana, 18 nov (EFE).- Los negociadores de paz de las FARC admitieron que el secuestro del general Rubén Darío Alzate es un «hecho extraordinario», aunque al mismo tiempo «normal» dentro de una guerra, por lo que llamaron a reflexionar sobre la necesidad de un cese el fuego bilateral para que avance el proceso de paz.
«Está delegación de paz tiene la disposición a contribuir a una pronta y sensata solución a este problema», afirmó ante los medios el guerrillero «Pablo Catatumbo» (alias de Jorge Torres Victoria), en la segunda intervención de la delegación de paz en La Habana, después de que el Bloque Ivan Ríos de las FARC confirmara que el general Alzate está en su poder.
«Catatumbo» señaló que un eventual cese el fuego bilateral generaría un medio ambiente «más tranquilo» para las conversaciones y «nos evitaríamos éste y otros incidentes que se pueden presentar en el transcurso de una guerra».