Al menos cuatro personas murieron hoy y varias quedaron atrapadas al desplomarse parte de un túnel de una autopista en el este de Japón, en el accidente de este tipo más grave en el país asiático en más de 15 años, según medios locales.
Un tramo de la parte superior del túnel de Sasago, de 4,7 kilómetros y situado a unos 80 kilómetros de Tokio, se desplomó a primera hora del día por causas que todavía se desconocen y dejó tres vehículos atrapados, entre ellos una furgoneta.
Uno de los vehículos resultó incendiado en el accidente y en su interior se hallaron al menos tres cuerpos sin vida, indicó la Policía.
El cuarto fallecido es el conductor de un camión que había logrado hacer una llamada de socorro tras el accidente desde su teléfono móvil, pero dejó de responder al mismo poco tiempo después.
Los equipos de rescate lograron encontrar su vehículo, perteneciente a una empresa alimentaria, ya entrada la noche, pero el hombre ya había sufrido una parada cardiorrespiratoria y no se pudo hacer nada por su vida, indicó la televisión NHK.
El accidente se produjo al desplomarse cerca de 150 paneles de cemento de la parte superior del túnel en un tramo de cerca de 100 metros, señaló la empresa Central Nippon Expressway, operadora de la autopista.
Se cree que todavía hay al menos tres personas desaparecidas bajo las placas de cemento, que según algunos testigos alcanzaron a al menos tres vehículos.
El hundimiento bloqueó el túnel y causó también un incendio en otro vehículo pequeño que pudo ser pronto controlado, aunque el humo y el caos que siguió al accidente hizo que muchos conductores abandonaran sus coches y salieran a pie del pasaje.
Uno de ellos, en declaraciones a la televisión pública NHK, indicó que tuvo que caminar durante más de una hora para llegar a la salida del túnel, ya que el accidente se produjo en el tramo medio, a 1,7 kilómetros de la salida más cercana.
Al lugar se desplazaron una quincena de camiones de bomberos, miembros de la policía y varias ambulancias, aunque las labores de rescate tuvieron que ser suspendidas temporalmente poco antes de las 13.00 hora local (04.00 GMT) ante el peligro de un nuevo derrumbe.
Los trabajos se emprendieron de nuevo tres horas más tarde después de que expertos inspeccionaran la zona, y al mismo tiempo se levantó un centro de primeros auxilios en las inmediaciones del lugar, según las imágenes retransmitidas por NHK.
Al menos tres personas fueron trasladadas a un hospital cercano con heridas de diversa consideración, entre ellas una mujer de 28 años que explicó a las autoridades que pudo salir de la furgoneta en la que viajaba con otras cinco personas.
El túnel, que es uno de los más largos de Japón, fue inaugurado en 1977 y está situado en la autopista de Chuo, en el este del país, la principal vía de conexión por carretera entre Tokio y el centro y el oeste del país.
La empresa Central Nippon Expressway indicó que la última revisión rutinaria del túnel se había realizado el pasado septiembre y entonces no se detectó ninguna anomalía, pese a lo cual la Policía ha abierto una investigación por posible negligencia.
En una rueda de prensa ofrecida en Nagoya (centro de Japón) tras el suceso, el presidente del grupo, Taketazu Kaneko, expresó su pesar por el «serio accidente» y aseguró que la prioridad en estos momentos es «rescatar a los que han quedado atrapados».
El tramo de la autopista cercano al túnel, situado en la provincia de Yamanashi, fue cerrado a la circulación.
Este es uno de los accidentes más graves de este tipo en Japón en más de 15 años, tras el ocurrido en febrero de 1996 en Hokkaido (norte), cuando el hundimiento de un túnel atrapó un autobús y un vehículo todoterreno y causó la muerte a veinte personas.
Japón tiene una amplia red de carreteras con cientos de túneles en su terreno montañoso, sujetos a estrictas normas de revisión y mantenimiento.