Kiev, 15 ago (EFE).- Las autoridades de Ucrania denunciaron hoy la entrada anoche de una columna de blindados rusos en la región de Lugansk, en el este del país, donde las fuerzas gubernamentales combaten a las milicias separatistas prorrusas.
«La inteligencia militar ha confirmado que una columna de transportes blindados y camiones cruzó la frontera por el paso ‘Izvárino’, cerrado temporalmente, y entró en el territorio de nuestro Estado», declaró el portavoz del mando de las fuerzas ucranianas que actúan en el este del país, Alexéi Dmitrashovski.
Agregó que, según los datos que obran en poder del mando, los vehículos militares tenían matrículas y distintivos rusos.
Dmitrashovski confirmó así las informaciones de periodistas occidentales, que aseguraron haber visto anoche cómo blindados rusos cruzaban la frontera ucraniana por «Izvárino».
Según el mando ucraniano, la columna rusa era poco numerosa y se dirigía hacia la localidad de Malogvardeisk, a unos 20 kilómetros al sur de Lugansk, una de las principales plazas fuertes de los separatistas en el este de Ucrania.
El incidente ha coincidido con la llegada a la frontera ruso-ucraniana del convoy con ayuda humanitaria enviada por Rusia para la población civil de Ucrania oriental.
Después de largas y tensas negociaciones, Kiev aceptó recibir, con determinadas condiciones, la ayuda humanitaria rusa.
La Guardia Fronteriza y el Servicio de Aduanas ucranianos llegaron hoy al puesto fronterizo ruso «Donetsk», frente a «Izvarino», para la revisión y certificación de la carga humanitaria rusa.
La ayuda humanitaria tiene como destino Lugansk, una ciudad al borde de la catástrofe humana, sin luz ni agua desde hace dos semanas y abandonada por la mitad de su casi medio millón de habitantes.
Los trámites en «Donetsk» deberán ser supervisados por representantes de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) y del Comité Internacional de la Cruz Roja, que acompañarán el convoy una vez entre en territorio ucraniano y se encargarán de repartir la carga entre la población civil de Lugansk.
El convoy ruso, integrado por 262 camiones, transporta según Moscú unas dos mil toneladas de cereales, azúcar, alimentos para niños, medicinas, sacos de dormir y generadores eléctricos.