Latinoamérica está inmersa en una carrera armamentista «perversa» y gasta más de 60.000 millones de dólares al año en sus Fuerzas Armadas mientras muchas personas pasan hambre y no tienen acceso a una buena educación, dijo hoy el expresidente costarricense y premio Nobel de la Paz Óscar Arias.
«Que América Latina gaste más de 60.000 millones de dólares en armas es realmente perverso, que la carrera armamentista más grande del mundo en los últimos diez años se haya dado en América Latina es absolutamente perverso», expresó el exmandatario en Miami (EE.UU.).
El dos veces presidente de Costa Rica (1986-1990 y 2006-2010) disertó en el simposio «Democracia en las Américas», organizado por la Fundación Zambrano y en el que participan expertos en derechos humanos, políticos, empresarios, activistas y académicos.
Mencionó que en una ocasión preguntó al expresidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva para qué su país quería más armas y cuál era su enemigo.
«El enemigo de Brasil es el mismo de todos nuestros países: las favelas, la pobreza, la desigualdad, el deterioro del medio ambiente, la falta de infraestructura y todas las necesidades de nuestros pueblos que no hemos podido satisfacer», enumeró el Nobel de la Paz 1987.
En el caso de Haití dijo que él logró convencer al expresidente haitiano Jean Bertrand Aristide que aboliera el Ejército en 1995.
Esa empobrecida nación caribeña siendo una «isla se armó hasta los dientes», según Arias.
«Y ese gasto militar es el principal responsable de la miseria humana que vive Haití. Sin embargo, nadie ha alzado la voz cuando el nuevo presidente de Haití está hablando de restituir al Ejército con el apoyo de Washington, cosa que realmente me indigna», manifestó.
En una conferencia de prensa posterior al simposio, al ser consultado sobre cuáles países invertían más en armas reiteró que Latinoamérica es la «región del mundo donde más se incrementó el gasto militar».
Algo que consideró injustificable porque, aseguró, América Latina no tiene conflictos fronterizos, ni enemigos demasiados poderosos militarmente hablando como para que las Fuerzas Armadas «aumenten su poderío militar».
Se pronunció a favor de invertir los recursos en las áreas sociales como educación, salud y programas como las orquestas juveniles para propiciar el bienestar de los latinoamericanos y mantenerles apartados de la violencia.
En lo que respecta a la democracia en la región, dijo que se ha fortalecido en las últimas décadas a pesar de se produjo «un golpe de Estado» en Honduras en 2010.
Aún así, agregó que «muchos Gobiernos de América Latina en lugar de avanzar en la consolidación de las instituciones democráticas han retrocedido y eso es lamentable», pero se abstuvo de precisar quiénes son.
Afirmó que «si no se avanza, se retrocede y eso es lo que le ha pasado a algunos regímenes en América Latina».
«Hemos avanzado mucho, sí, pero no lo suficiente. Por lo menos nunca me imaginé que en mi región, Centroamérica, pudiese haber un golpe de Estado después de que silenciamos las armas con la firma del plan de paz en 1987. Sin embargo, se dio», aseveró.
El sistema democrático y las amenazas que afronta en Latinoamérica es uno de los temas principales del simposio que se transmitió en directo en varias universidades de Estados Unidos, bajo el mando de la Universidad Nova del sur de Florida, y que concluye el viernes.
La Fundación Zambrano es una organización fundada por José Zambrano dedicada al desarrollo de proyectos que educan, preparan y guían a la próxima generación de líderes de las Américas, según los organizadores.