Con su característica creatividad y fortaleza de los latinos, un mexicano en la ciudad de Ottawa busca conservar a la tradicional tortilla mexicana elaborada con el sistema de Nixtamal. Una forma de fabricación que incluye la molienda del maíz blanco y posteriormente el uso de una máquina muy típica de las tortillerías mexicanas.
Miguel Ángel Jiménez Reyes es el fundador de la empresa Tortilla Maker y junto con su familia han logrado un sueño de tener una tortillería apegada a los más altos estándares de calidad y al sabor, textura e ingredientes que hacen de la tortilla un manjar latino en Canadá.
“Aquí sabe a México, huele a México y hasta se oye a México. Tenemos tortillas nixtamalizadas, tenemos todo el proceso de nixtamalización en este lugar, como se hace en México. Nosotros usamos maíz orgánico blanco que es importado de México y de Estados Unidos. Lo ponemos en una paila, luego lo ponemos en agua con cal especial para consumo humano. Después de hora y media queda nixtamalizado y se deja reposar otras horas. Luego se pone en el molino el maíz y se comienza la molienda lo que deriva en la masa que sirve para hacer las tortillas”, comentó el empresario mexicano.
Después la masa la pasamos por el horno que es una tortilladora común y corriente que todo mundo conoce en México. Es una máquina que pasa la masa por un mecanismo que la adelgaza y esta nivelada para hacer las tortillas del tamaño y grosor que se necesita. Las corta ahí mismo e inicia el proceso de cocimiento de la tortilla.
Aquí tenemos una capacidad para hacer entre 80 y 90 kilos por hora y vamos acomodando la tortilla. Tenemos varios tamaños, el taquero que son mini tortillas, después la tortilla para hacer tacos y la tortilla mediana para las casas, también tenemos una medida más grande para hacer quesadillas o platos más elaborados.
Con seis meses produciendo hoy en día ya cuentan con diversos productos como son totopos, tostadas, tamales a base de la misma masa, también hacen las Salsas Carlota inspiradas en las recetas originales de la bisabuela Carlota Silvestre Cornejo, transmitidas de generación en generación.
Miguel es de Mexicali, en el norte de México, pero siempre vivió en Aguascalientes. Es abogado, se casó con una canadiense y después de un tiempo decidieron vivir en Canadá. Lleva viviendo 14 años en este país y con el apoyo de su familia ha logrado impulsar este negocio.
“Después de la pandemia me entró la nostalgia por la comida mexicana y decidimos desarrollar la idea de una tortillería. Pero también por qué no hay tortillas de verdad en esta región capital. Además, las tortillas que se venden industrializadas contienen muchos químicos que no son sanos y no saben como las tradicionales tortillas, por eso me decidí por este tipo de negocio”, añadió.
Miguel está contento porque es la única tortillería de la Región Capital que incluye Ottawa y la zona de Gatineau y ha tenido muy buena recepción de los clientes tanto canadienses como latinos.
La tortillería se encuentra en la zona de Orléans en el 2003 de la calle St. Joseph Boulevard.
“Las tortillas de maíz han sido un alimento básico en México gracias a sus beneficios nutricionales. Con el tiempo, también se han convertido en un elemento básico de la cocina internacional, un lenguaje culinario universal que trasciende culturas y fronteras. No es de extrañar que la cocina mexicana, incluidas las tortillas de maíz, sea reconocida como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO). Tortilla Maker también nació del deseo de preservar el antiguo método de hacer tortillas de nixtamal, preservar su sabor y aroma únicos, expandir su popularidad y promover el consumo de maíz en Canadá”, apuntó Jiménez Reyes.
Entre sus planes está consolidar el negocio dándolo a conocer y que más cantidad de población conozca que en Ottawa ya hay una tortillería tradicional con productos 100 por ciento de maíz y saludables