Investigarán pago que hizo el gobierno a fabricante de la vacuna COVID-19, pues implica una suma de más de $300 millones de dólares que se hicieron a la instalación, que finalmente cerró sin producir nada.
La noticia ha suscitado preocupación y críticas en todo el país, ya que el gobierno desembolsó una cifra asombrosa de $323 millones por una fábrica de vacunas que nunca llegó a producir ninguna dosis.
La inversión millonaria en esta instalación, que nunca cumplió su propósito, ha provocado preguntas sobre la gestión de los fondos públicos.
Los parlamentarios de la Comisión de Salud votaron el miércoles para lanzar una investigación sobre los más de $300 millones que gobierno liberal pagó a una empresa farmacéutica con sede en Quebec, que ahora está cerrada, y cuya vacuna contra el COVID-19 nunca llegó al mercado.
El diputado conservador Stephen Ellis presentó la moción que llamaba a la investigación después de que el National Post revelara la semana pasada que el Gobierno pagó $150 millones a Medicago en forma de un acuerdo de compra anticipada «no reembolsable».
El gobierno Liberal firmó ese acuerdo en octubre de 2020 para asegurar hasta 76 millones de dosis de una vacuna contra el COVID-19 de origen vegetal que estaba desarrollando Medicago.
Adicionalmente, el gobierno proporcionó a Medicago $173 millones adicionales para investigación y desarrollo, así como para la construcción de la instalación de fabricación de la empresa en Quebec City.
Investigarán pagó que hizo el gobierno a fabricante de la vacuna COVID-19, que nunca llegó al mercado
«Se desperdiciaron trescientos millones de dólares de dinero de los contribuyentes y… se ocultó profundamente en un documento», dijo Ellis al comité. «El gobierno liberal, que pregonaba transparencia, ha llegado a lo más profundo de una cueva oscura y húmeda».
Salud Canadá aprobó la vacuna de Medicago en 2022, pero la empresa finalmente canceló la producción después de que la Organización Mundial de la Salud la rechazó para su uso de emergencia debido a los vínculos de la compañía con una importante tabacalera.
En ese momento, Philip Morris International tenía una participación minoritaria en Medicago. La empresa se desprendió de todas sus acciones a finales de 2022.
En febrero, Mitsubishi Chemical Group, que en ese momento era propietario del 100 por ciento de Medicago, anunció el cierre de la empresa farmacéutica, citando «cambios significativos» en el mercado de vacunas.
El ministro de Salud, Mark Holland, dijo antes de que el comité votara a favor de iniciar la investigación que los conservadores estaban pidiendo «una conexión con psíquicos para que podamos conocer el futuro».
Además, Holland, recordó al comité los tiempos más oscuros de la pandemia, cuando todos estábamos rezando por una vacuna, alegando que el gobierno hizo lo más responsable. “Apostamos por todas las opciones viables desde el punto de vista científico», declaró Holland posteriormente a los periodistas.
