Los Hermanos Musulmanes de Egipto se preparan para protestar hoy contra el reciente golpe de Estado del Ejército, que depuso al presidente Mohamed Mursi y nombró en su lugar al jefe del Tribunal Constitucional, Adli Mansur.
La principal concentración está prevista en la plaza de Rabea al Adauiya, en el barrio cairota de Ciudad Naser, donde los islamistas han protagonizado en los últimos días manifestaciones para defender la legitimidad de Mursi, que fue elegido democráticamente hace un año.
El portavoz de la Hermandad Ahmed Aref insistió ayer en la necesidad de que las marchas sean pacíficas y no deriven en violencia, así como que las instituciones del Estado garanticen la seguridad.
La llamada Alianza Nacional en Defensa de la Legitimidad Electoral, integrada por los Hermanos y otros grupos, ha pedido la restitución de Mursi, que militó en la cofradía hasta poco antes de asumir la Presidencia.
Desde que el miércoles pasado las Fuerzas Armadas dieran un golpe contra Mursi, apoyadas por otras fuerzas políticas y líderes religiosos, los partidarios del islamista han seguido protagonizando protestas, algunas de las cuales han derivado en disturbios y causado heridos.
El mandatario depuesto sigue en paradero desconocido de forma oficial, aunque los Hermanos Musulmanes sostienen que está bajo custodia militar e incomunicado.
Por su parte, la campaña «Tamarrud» (rebelión), que impulsó las masivas protestas del pasado domingo que pedían la renuncia de Mursi, ha organizado una manifestación hoy en la plaza Tahrir y el palacio presidencial de Itihadiya en El Cairo.
El objetivo de esas dos marchas es «la protección de la revolución», ya que consideran que el Ejército ha iniciado una nueva etapa de transición política en la que confían que se cumplan sus aspiraciones.
Las Fuerzas Armadas de Egipto pidieron hoy a los egipcios que dejen de lado las venganzas personales y sean tolerantes con el fin de lograr la reconciliación nacional, al tiempo que garantizaron la libertad de expresión y de reunión.
En un mensaje difundido esta madrugada en la página oficial del portavoz del Ejército, Ahmed Mohamed Ali, los militares alertaron del peligro de cualquier acto de sabotaje o ataque a las instalaciones públicas o privadas, lo que representa una «amenaza para la paz social y los intereses de la nación».
Además, llamaron a no adoptar medidas «extraordinarias o arbitrarias contra cualquier grupo o movimiento político», después de que líderes de los Hermanos Musulmanes hayan comenzado a ser detenidos o buscados por la Justicia.
El Cairo, 5 jul (EFE).-