El miércoles, el premier de Quebec, Francois Legault, pidió a Trudeau que cierre el cruce improvisado al sur de Montreal, asegurando que la provincia no tiene la capacidad para atender a los inmigrantes mientras esperan que se procesen sus solicitudes de asilo.
Trudeau añadió que interceptar a los inmigrantes irregulares en Roxham Road, donde se ha establecido un puesto de RCMP, permite a las autoridades canadienses realizar verificaciones de seguridad y garantizar que los inmigrantes no estén «perdidos e ilegales dentro de Canadá».
Las negociaciones están en curso con Estados Unidos, aseveró Trudeau, para cambiar el Acuerdo de Tercer País Seguro, lo que ha llevado a los cruces irregulares.
Según ese acuerdo, que ha estado vigente desde 2004, los solicitantes de asilo que ingresan a los EE. UU. deben reclamar el estatus de refugiado allí y pueden ser rechazados si intentan ingresar a Canadá a través de un cruce fronterizo oficial para presentar una solicitud de refugio. Sin embargo, los solicitantes de asilo que cruzan la frontera de forma irregular pueden presentar una solicitud de asilo una vez que estén en Canadá.